La Unidad Central de Redes de Inmigración Ilegal y Falsedades Documentales (UCRIF) de la Policía Nacional ha llevado a cabo una gran operación por una estafa millonaria en la que hay implicados abogados y al menos un funcionario de Palma.
La estafa supera el millón de euros. Por una lado, se habría falsificado documentación de extranjeros, principalmente inmigrantes marroquíes, y por otra se falsificó documentación para cobrar créditos concedidos a personas que, en realidad, no los habían solicitado.
De momento hay dos detenidos y se han practicado varios registros.
La trama supuestamente estaba formada por empresarios, abogados, algún funcionario e inmigrantes, que manipulaban documentación para obtener ayudas, conseguir nacionalidades y también para solicitar préstamos de forma irregular.