Se encuentran desde este miércoles en la perrera municipal de Llucmajor. Son dos perros jóvenes, mestizos, «muy buenos», dicen. Daniela, la mujer italiana de 65 años herida gravemente en el incendio del Arenal, los salvó de las llamas.
Eran las siete de la mañana de este miércoles cuando saltaba la alerta en el bloque de apartamentos de la calle Gran i General Consell: Fuego en el primer piso. Las llamas se propagaban con rapidez en la vivienda, por la gran cantidad de enseres acumulados, y en cuestión de minutos el fuego devoraba todo lo que encontraba a su paso. El humo y las llamas se extendían por las escaleras del edificio, atemorizando a los vecinos.
Daniela, como otros moradores del inmueble afectado, salieron de sus casas para tratar de alcanzar la calle. Ella vivía en el cuarto piso. Algunas personas intentaban ponerse a salvo incluso a través de la fachada con la ayuda inicialmente de algunos ciudadanos y después de los bomberos.
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Daniela optó por bajar la escalera y no estaba dispuesta a dejar allí, en peligro, a su perros. Salió con ellos al rellano y atravesó las llamas para ponerlos a salvo. Lo logró, salió del edificio con sus dos mascotas, pero ella se había quemado gravemente.
Los facultativos le atendieron a pie de calle y con carácter de urgencia fue trasladada al hospital de Son Espases. Su estado era crítico, con quemaduras en torno al 60% de su cuerpo. Dada su gravedad, horas después ingresaba en el hospital Vall d'Hebron.
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Sus animales, sanos y salvos gracias a ella, se encuentran desde entonces en la perrera municipal. Allí aguardan el regreso de Daniela.