Natalia Sánchez Uribe, la joven mallorquina desaparecida desde el pasado día 1 de mayo en París, ha aparecido este miércoles sana y salva, según han confirmado las autoridades francesas y españolas.
Natalia se encuentra en buen estado, pero algo desorientada. Una patrulla de la policía francesa la localizó en la calle y fue trasladada a un centro médico, donde su padre la ha reconocido.
A la estudiante de Palmanova, de 22 años, se le perdió la pista la pasada semana. Había ido a casa de una amiga a llevar dos maletas. Tenía previsto pasar allí las dos últimas semanas del curso. Le dijo que volvía a su piso a recoger una última maleta y ahí se le perdió la pista. La joven no contestaba al teléfono y, desde ese momento, tampoco volvió a utilizar sus redes sociales.
La mallorquina desaparecida llevaba cuatro días en un hospital de París
Varios de sus amigos han explicado estos días que Natalia les había contado que tenía ganas de marcharse de París, que se sentía sola y que desde hacía semanas se sentía vigilada.
Sus padres denunciaron su desaparición y este domingo se trasladaron hasta la capital francesa para seguir de cerca la investigación y colaborar con la policía francesa, encargada del caso junto a la Guardia Civil. Este mismo miércoles su padre, en un comunicado difundido por la Fundación Quién Sabe Dónde, aseguraba que «todas las energías están centradas en encontrar a nuestra hija». Desde la misma fundación han comunicado que, tras la localización de Natalia, la familia pide ahora intimidad para poder recuperar la calma tras días de angustia y mucha preocupación.
La desaparición de Natalia fue considerada «inquietante» por los investigadores galos, que este lunes localizaron su mochila, con su móvil y su portátil, en las inmediaciones de la universidad.
Durante las últimas horas, la policía ha interrogado a su entorno más cercano y también a su casero porque el día de la desaparición había quedado con ella para que le entregara las llaves del piso. El hombre de 42 años le esperó dentro de la vivienda durante horas. Angelo Pavia ha explicado en una entrevista en La Vanguardia que estuvo esperando a Natalia, le mandó mensajes, pero no se presentó a la cita.
Cabe recordar que Natalia Sánchez Uribe estudia Económicas en la Universitat Autònoma de Barcelona y este año se había trasladado a París, a la Universidad de la Sorbona, con un Erasmus. Le faltaban apenas dos semanas para concluir su estancia en Francia, cuando se dejó de tener noticias de ella.
En Calvià, donde reside su familia, la noticia de su desaparición causó gran consternación y preocupación. Afortunadamente, la mejor de las noticias ha llegado este miércoles, justo cuando se cumplían siete días de su desaparición: Natalia ya está con su familia.