«No sabemos cómo saldremos adelante: nuestra hija era un ángel. Ahora ella está muerta, pero su madre y yo también estamos muertos en vida». Biel Fornés y María Rodríguez, los padres de la adolescente atropellada mortalmente por una conductora bebida en sa Ràpita, concedieron este miércoles una entrevista a Ultima Hora en la que pidieron medidas «mucho más duras» contra los conductores ebrios y recordaron que Paula «era una niña que siempre estaba feliz. Siempre reía. Era la mejor hija del mundo».
Paula había acabado el curso en Es Liceu de Marratxí y esa noche de Sant Joan salió con sus amigas para celebrarlo.
Había acabado ESO y quería estudiar Magisterio. Le habían quitado los brackets y, lo que son las cosas, esa misma noche nos dijo: «¡Qué feliz estoy!». Siempre estaba contenta, era una niña feliz. Se iba con sus amigos de fiesta, pero para protegerla preferimos que no saliera por Magaluf y como tiene la casa de sus abuelos en sa Ràpita al final se fue con los amigos allí.
¿Qué pasó?
Eran aproximadamente la 1.55 horas de la madrugada, del sábado al domingo, y mi hija volvía de bailar y de pasarlo bien, como hacen los jóvenes de su edad. Iba con sus amigos Laia Delgado, Laia Cat, Xisco Meca, Yolanda Hernández y Joan Riusech, a los que por cierto quiero agradecer lo bien que se portaron tras el accidente. Joan la intentó reanimar y lo pasó tan mal que después se desmayó.
¿Estaban cerca de casa su abuela?
A unos 100 metros. Ya llegaban. Los chicos caminaban por el carril bici y peatonal en dirección a s?Estanyol y de repente llegó esa conductora haciendo eses, invadió el carril y pegó un volantazo. Fue entonces cuando atropelló a Paula.
La conductora no se detuvo a auxiliarla.
Eso es terrible. Se fue con su coche sin ayudarla, pero como todavía no era muy tarde había otros conductores por allí y uno de ellos la siguió. Cuando se paró para girar la bloquearon y otro vecino le quitó las llaves del coche. Después llegó la policía e intentaron reanimar a Paula.
¿Cuándo se enteraron ustedes?
Nos llamaron sobre las dos de la madrugada, pero no sabíamos el alcance del accidente. Nos tuvieron retenidos, en el buen sentido, porque no querían que subiéramos a sa Ràpita en ese estado de nerviosismo. Nos decían que la estaban reanimando y que luego la llevarían a la UCI. A las cuatro vino mi primo y me dijo que había muerto. Se nos cayó el mundo encima.
Son una familia muy querida en Marratxí y mucha gente se ha volcado con ustedes.
Sí, y estamos muy agradecidos a muchas personas. El homenaje que le hicieron a mi hija en Es Liceu fue precioso, con fotos, con velas. Yo hablé unas palabras y conté que sentía mucha rabia y un dolor que no puedo describir. No se lo deseo a nadie, ni incluso a ella (la conductora). Nos han quitado la vida a mi mujer y a mí. No podré perdonar, hoy no, por lo menos. Maldigo el día que cogió el coche así como iba. Mi hija era feliz, siempre sonreía. No hay vida en mí. Siento odio. No sé cómo podré superar esto, sólo quiero besar a mi niña y desearle un buen viaje. Eres mi ángel y espero verte pronto.
Hoy han regresado al lugar del atropello en sa Ràpita.
Hemos colocado unas flores y hemos agradecido a los vecinos que ayudaron. También quiero agradecer de todo corazón a mi hermana todo lo que hizo esa noche terrible del atropello. Y a los alcaldes de Campos, Marratxí, Montuïri y Binissalem, que también nos han arropado. Hay tanta gente a la que queremos dar las gracias que no queremos dejarnos a nadie.
La conductora ya había sido condenada por circular bebida.
Con esto queremos ser muy cautos, porque no lo tenemos confirmado, pero dicen que le habían retirado el carnet dos veces por ir bebida. No deseo más mal a nadie, pero nos han dicho que esa mujer tiene una hija de la edad de la mía. Que piense que me la ha quitado a mí cuando mire a la suya.
Han anunciado una cruzada para que se endurezcan las penas contra los conductores bebidos.
Queremos que la Justicia sea justa, y no lo que hay ahora. ¿Cuántos casos hay en los últimos años de muertos por conductores bebidos en Mallorca? Ya está bien, esto no puede seguir así. Las penas son ridículas. Ahora ha sido Paula, ¿quién será el siguiente?
¿Creen que se deben cambiar las leyes?
Lo que está claro es que con lo que hay ahora las cosas no funcionan como toca. Muchísima gente conduce borracha y si no hay mano duro con ellos seguirán rompiéndose familias como la nuestra.
En las redes sociales también se han volcado con ustedes.
Lo que ha pasado es tan terrible que cuesta entenderlo. Paula era un sol, un encanto de persona y de hija. Y una hermana increíble para nuestro hijo Marc. Mucha gente la conocía y la quería, por su carácter alegre y porque siempre tenía una sonrisa sincera para todos. Por eso creo que estamos recibiendo tantas muestras de apoyo. Mi mujer y yo lo hemos repetido varias veces, pero no me cansaré de decirlo otra vez: nuestra hija Paula era un verdadero ángel. No sabemos cómo conseguiremos salir adelante sin ella.
El cantante Raúl, de "Operación Triunfo", recuerda a la joven mallorquina
Paula acudió hace unos días al concierto de Operación Triunfo en Inca «y se lo pasó estupendamente, porque era muy fan de los cantantes», explicó ayer su familia. Raúl, uno de los artistas, ha rendido homenaje a la joven mallorquina en las redes sociales y ha colgado una foto suya en la que aparece el siguiente mensaje: «Descansa en paz, Paula, sigue soñando allá donde estés».
El pasado día 22 la familia celebró el 50 cumpleaños de Biel, el padre. Y Paula participó activamente en los preparativos de la fiesta, junto a su hermano Marc y su madre, María. Sólo 24 horas después de aquella efeméride feliz (cuya imagen reproduce este diario en la portada), la adolescente acudió con sus amigos a sa Ràpita, para la noche de Sant Joan. Una conductora ebria la mató.
Homenaje de los alumnos y profesores de Es Liceu: «Nos dejó con una sonrisa»
Los alumnos y profesores de Es Liceu de Marratxí, donde cursaba estudios Paula Fornés, le han rendido un emotivo homenaje con flores, velas y cartas en su recuerdo.
«Fue una gran amiga, más que eso, una más de la familia, y lo seguirá siendo en nuestros corazones, porque ella nos ha dejado una marca que nunca se borrará», escribió una de sus compañeras, que añadió: «Nos ha tocado vivir la parte dura de la tragedia, pero puedo asegurar que ella no sufrió, que nos dejó con una sonrisa y con su felicidad. Algún día nos volveremos a ver».