Tras la desestimación por parte del TSJIB de las primeras querellas interpuestas contra el juez Manuel Penalva y el fiscal Miguel Ángel Subirán por parte del abogado Vicente Campaner, éste ataca de nuevo.
El letrado ha interpuesto dos nuevas querellas contra los instructores de la causa de presunta corrupción por encubrimiento y difamación. En las mismas, Campaner sostiene que «al principio se sospechaba que los querellados estaban cegados por su deseo manifiesto y no oculto de condenar a los investigados a cualquier costa (recuérdese la frase delante de todos los letrados en la declaración de la madame, que dijo -el juez- que si me tengo que llevar a 50 policías más por delante, me los llevo», recuerda la querella.
El escrito de denuncia también hace constar que «en la misma declaración de la citada testigo, el juez la defendió ante la propuesta del abogado de Miguel Pascual, a ser conducida a la finca de éste, a la que decía que había ido tantas veces, pero el instructor lo impidió al decir que no podía porque estaba de baja, y acto seguido, ante la propuesta del abogado de que condujera a los agentes de la Guardia Civil y ella solo los dirigiera, puso como excusa que tenía que ir al colegio a por su hijo».
En la querella, de nueve folios, Campaner enumera una serie de episodios en los que, supuestamente, juez y fiscal habrían cometido delitos de encubrimiento y difamación.
Por otro lado, los promotores del movimiento 27N han anunciado en las redes sociales que durante la jornada de este lunes solicitarán autorización a la Delegación del Gobierno para convocar una nueva marcha contra los instructores. «Habrá tercer asalto», afirmaba Campaner.
En esta ocasión, la marcha se celebrará en fin de semana para «fomentar la participación ciudadana».