Medio año después de que Fátima Cherkaoui muriera en Palma tras ser sometida a una liposucción en una clínica privada, las autoridades han autorizado la repatriación del cadáver, que se llevó a cabo este martes. Los dos hijos de la víctima ya se encuentran en Casablanca, donde este miércoles se celebra el entierro.
La repatriación del cuerpo de la mujer, que llevaba más de 15 años viviendo en Mallorca, se ha demorado tanto por motivos judiciales y burocráticos. Por un lado, la familia quería una segunda autopsia y, por otro, desde el Consulado se exigían una serie de certificados para el traslado.
Este martes por la mañana, finalmente, se autorizó la repatriación y por la tarde el cuerpo de Fátima fue subido a un avión, que hacía escala en Madrid. Después, debía continuar hacia Casablanca.
Kamal, uno de los hijos de Fátima, que reside en Mallorca, viajó también a Marruecos y su hermano pequeño lo hizo el pasado sábado. Fuentes próximas al caso han informado que el Ayuntamiento de Santa María, donde reside la familia de Fátima, ha pagado el billete del hijo menor, para colaborar económicamente con la repatriación. En un año los dos hijos de Fátima perdieron primero a su abuela, luego a su padre y el 7 de marzo a su madre.