Un empleado del empresario detenido esta semana en la operación contra la corrupción en la Platja de Palma ha declarado que el dinero que los agentes han encontrado en los registros es suyo.
Se trata de una cantidad que ronda los 180.000 euros, que fue encontrada en una de las cervecerías que posee el hotelero. Los investigadores piensan que ese dinero pertenecía al acusado, pero el trabajador sostiene que procede de la venta de una casa y que es suyo. Por motivos que no han trascendido, decidió guardarlos en la cervecería en lugar de en un banco.
El empleado también quedó en libertad el viernes por la noche, tras declarar en los juzgados. El tercer arrestado es un presunto testaferro de M.B.P., y también pudo volver a su casa tras ser interrogado en la sede judicial. La jueza Carmen González mantiene el secreto del sumario, aunque ha trascendido que la siguiente fase de la operación podría estar próxima y se centraría en otros empresarios de la noche.