Conducir con lluvia y viento multiplica el riesgo que, de por sí, conlleva la carretera. A consecuencia de una fuerte ráfaga de viento, un motorista que circulaba por el camí de Llucmajor, en Palma, sufrió una caída casual de su motocicleta.
Rápidamente, agentes de la Policía Local y personal sanitario del 061 se desplazaron hasta el lugar del suceso. El varón, sufrió una fractura abierta en una de sus piernas y precisó ser intervenido quirúrgicamente de urgencia. Su estado era grave.
Cabe destacar que en toda la Isla el viento y la lluvia ocasionaron numerosas colisiones sin importancia.
Por otro lado, en el Camí de Son Rullán de Palma, junto a un colegio, apareció un Peugeot 307 de color gris empotrado contra un árbol sobre la acera. Al parecer, el conductor se dio a la fuga, pero la policía sospecha que debe estar herido de consideración. Todo apunta a que el conductor no llevaba puesto el cinturón de seguridad y colisionó su cabeza contra la luna delantera la cual fracturó con el impacto. En el cristal podían apreciarse restos del cabello del ocupante.
Por otra parte, según información a la que ha tenido acceso Ultima Hora existen varios informes policiales que comunican a las autoridades competentes que la carretera MA-2200, es decir, sa Pobla-Pollença, el asfalto es deficiente, viejo y no tiene agarre. En dicha carretera se han producido varios accidentes últimamente. De hecho, el sábado se produjo un accidente muy grave y tres chicas permanecen aun hospitalizadas.