Un hombre de etnia gitana intentó ayer tarde arrollar a dos hombres, padre e hijo, de la misma etnia, con un turismo que acabó empotrado en la puerta metálica de un garaje.
Los hechos ocurrieron alrededor de las cinco de la tarde en la calle Manacor de Palma, a la altura del número 128. En primera instancia se desplazaron al lugar dos motoristas de la Policía Local, al pensarse que se trataba de un atropello por accidente, pero al comprobarse lo ocurrido acudieron varias unidades de la UII. Después, al confirmarse que se trataba de una tentativa de homicidio, se hizo cargo de las investigaciones el Cuerpo Nacional de Policía.
El turismo utilizado es un Ford Mondeo que había sido previamente sustraído. El hombre que lo conducía estuvo esperando un largo rato en la calle Manacor. Cuando, a la hora señalada, observó que padre e hijo salían de un local, arrancó y a toda velocidad subió sobre la acera e intentó arrollar a los dos hombres.
Estos tuvieron tiempo de advertir lo que se les venía encima, por lo que dieron un salto y ambos evitaron ser alcanzados por el coche, sufriendo lesiones calificadas en principio de leves.
Por su parte, el conductor salió del vehículo tras quedar empotrado y se dio la fuga a la carrera.
Las dos víctimas residen en la zona, por la barriada de la Soledat, y parece que pudieron facilitar la identidad de la persona que intentó arrollarles.
Según las primeras investigaciones, podría tratarse de una tentativa de homicidio motivada por un ajuste de cuentas.
Varias patrullas del CNP dieron batidas por la zona en busca del agresor, y el caso pasó a manos del Grupo de Homicidios.