Desde el pasado fin de semana, la joven cantante Nerea Real, hija de otro no menos buen cantante, Juan Real, tiene nuevo disco en el mercado. Lo bailao, se titula, disco que puede que tenga una gran difusión debido a que esta joven cantante mallorquina tiene más de 200.000 seguidores en sus plataformas digitales. Por eso y porque la chica lo vale.
No hemos tenido oportunidad de hablar con ella, pero si con su padre, quién nos ha hablado de Lo bailao, de cuya letra es autora, mientras que la música es una mezcla de estilos y sonidos muy de hoy, aderezados con un pequeño toque andaluz. Nerea, además, toca el piano y guitarra , y pese a su juventud ha participado en programas de la tele, como Idol Kids (Tele 5), donde llegó a la semifinal. A raíz de esta experiencia contó con el apoyo de Omar Montes y Lerica.
En un futuro próximo, Nerea tiene previsto dar a conocer varios temas más, también suyos, e iniciar su prometedora carrera musical.
El viaje de Buele
Nuestro amigo Cecili Buele sigue de viaje por tierras peruanas. «Realmente, se está convirtiendo cada día en el viaje más largo de mi vida, antes de cumplir mis 80 años -nos dice vía whatsApp-. Un viaje plagado de sorpresas admirables, de encuentros personales muy emotivos con viejas amistades peruanas, de imprevistos sorprendentes, de algún que otro contratiempo indeseado, de nuevos hallazgos ricos, y enriquecedores, del contacto intenso y directo con estilos de vida diferentes, de vivencias y experiencias tan vitales que, espero, me ayuden a proseguir mi camino, más allá de los 80, con energías renovadas y con la ilusión de siempre, contribuyendo de alguna manera, aunque sea muy poquito, en la construcción de un mundo más libre, más justo, más fraterno, más amable... Con la ayuda de Dios».
Todas esas vivencias las está contado en su blog, socrodamon.blogspot.com, incluyendo, entre otras cosas catorce entrevistas breves a personas que tienen que ver con Mallorca, entre ellas, Margalida Colmillo, a quién conocimos hace muchos años, en una vista que le hicimos en el núcleo urbano que fundó hace más de 30 años, y dónde vive felizmente.
Eventos culturales
Estábamos en una fiesta, y a punto de irnos, nos encontramos a Beatriz Barón y Patricia Chinchilla enzarzadas en una conversación que las mantenía aisladas de cuanto les rodeaba. Así que, con la excusa de que nos íbamos y que nos estábamos despidiendo, nos acercamos a ellas y… Pues resulta que hablaban de proyectos, y lo hacían procurando no dar tres cuartos al pregonero, sino más bien discretamente. «¿Qué, algún plan entre manos…?, preguntamos. «Pues sí -respondió Beatriz, te lo cuento, pero muy escuetamente, pues estamos dando los primeros pasos, por tanto quedan muchas cosas por atar, pero… Sí, voy a dirigir mi tercer corto, y ella -señala a Patricia- será una de las dos protagonistas. La otra seré yo. No te puedo adelantar mucho más, salvo que se rodará en Palma y que tema girará en torno a lo social».
Recordaremos que su primer corto fue Alsamt (Silencio), en el que, en menos de cuatro minutos, hace una denuncia, que tiene al postureo como su principal protagonista, el cual es totalmente opuesto a la Cultura, pues a nada que aparece esta, echan a correr. O no la hacen caso y siguen a lo suyo. Basta, si no, ver lo que pasa hoy en las exposiciones: la gente va más a por la croqueta y la copa de vino o de cava, que a ver el cuadro o la escultura.
El segundo corto de Beatriz giró en torno a la problemática de las Kellys, o camareras de pisos de los hoteles, para el que contó con Laura Dibildos y Carmen Morales. Fue, también, un éxito.
Otro trabajo más
La otra mañana nos encontramos en plena calle Sant Miquel con Salvador Martínez, que vestía de blanco, de pies – sandalias, con calcetines blancos- a cabeza -barba y pelo blanco-. Nos dijo que iba a que le arreglaran el móvil, «pues mañana me voy a Valencia con mi hija, para estar unos días con mi biznieta».
Nos contó que ahora vive solo y exclusivamente de la sauna que tiene, la Spartacus, «pues que a la Gran Sara, en la que me transformo, desde hace año y medio no la llaman. Más o menos desde que cerró el Bachus… Y si me preguntas por qué no la llaman, tampoco sabría qué decirte. Y es que no me lo explico. Porque locales, aunque menos que antes, los sigue habiendo, pero nada…».
Pues qué pena, ¿no? Y tu amiga, La Terremoto de Alcorcón, ¿tampoco…? «Tampoco. Hace dos años estuve en la fiesta que cada verano hace en el Parc de la Mar… Y muy bien, eh…. Pero el año pasado no me invitó, y a la fiesta que ha hecho este año, tampoco».
Ni tampoco la hemos visto anunciada en los carteles y programas de la Semana del orgullo LGTBI. «Pues tampoco han contado con ella, lo cual me sorprende, dado que la Gran Sara es muy conocida… Una lástima, de verdad. El personaje lleva más de 12 años cantando en distintos escenarios de la isla, pero, sin embargo, ahora no la llaman». Pues que pena, le decimos. «Y que lo digas -se lamenta-, pero la Gran Sara va a seguir estando en el mercado. Pienso que es un bache, por el que suelen pasar muchos artistas».
Pues esperemos que sea eso. Y mientras tanto…. «Pues ya te digo, como Gran Sara, buscando un escenario, y como Salvador Martínez ejerciendo de bisabuelo, más en la distancia que personalmente, y trabajando a tope en la sauna gracias a una clientela que no falla ni siquiera en verano».