La fiesta no se ha limitado a lo programado por el Ajuntament de Palma. Miles de personas han disfrutado de la Revetla Alternativa de Sant Sebastià, que llenó Ciutat de actos y conciertos a lo largo de todo el día, sobreponiéndose al frío y la lluvia hedónicamente. Con el cántico avui sa festa és tot lo dia, avui tot Palma cremarà como bandera, centenares de personas se reunieron al mediodía en el Carrer dels Oms para dar el sus a la Revetla con el tradicional txupinasso frente al Bar España, el antiguo Can Vinagre, organizado por la Confraria de Sant Sebastià desde hace más de una década.
«Me encanta Sant Sebastià. Me encanta. Me gusta ver a todos mis hijos aquí reunidos. Os miro y veo a vuestras madres», exclamó desde el balcón de Can Vinagre un particular Julio Iglesias que, junto a ‘el Papuchi', dio el pregón de este año, pasado de nuevo por agua y concluido con el típico brindis con anís del mono. Acto seguido, los cofrades se dirigieron a sus dinars de germanor.
Después de comer, las 45 cofradías que reúne la Obreria de Sant Sebastià se han juntado en la Plaça de Llorenç Bisbal donde, con la música de DJ Sr. Secreto y la Banda de Música Filharmònica Porrerenca, colocaron sus pañuelos identificativos en el brazo incorrupto de Sant Sebastià y, aunando fuerzas, lograron vencer a la peste bubónica. Allí siguieron con la fiesta hasta las 23 horas.
Por su parte, la Coordinadora de Festes Alternatives, un conjunto de asociaciones y entidades socioculturales de los barrios de Canamunt y sa Calatrava, organizó ocho conciertos, dos cancelados por el tiempo, en plazas del casco histórico. A pesar de las precipitaciones, fueron muchos los que eligieron Ses Sant Kanuteres, preparadas para la lluvia con lonas de plástico de primera categoría.