Guionista, presentadora, actriz, locutora y, naturalmente, uno de las grandes voces femeninas del humor. Eva Hache es capaz de armar un desternillante monólogo sobre prácticamente cualquier tema. Su talento y personalidad le han permitido atreverse con todo, desde sus célebres apariciones en el Club de la comedia, a conducir dos galas de Los Goya, así como en diferentes obras de teatro y programas de televisión; de hecho, fue la primera mujer que tuvo su propio late night show. Las tablas y el bagaje, como ven, le salen por las orejas. Y ahora nos visita inmersa en la presentación de Mentes peligrosas, un montaje en el que estará arropada por otras tres mentes afiladas: Ana Morgade, Luis Piedrahita y Carolina Iglesias. Juntos impulsan un show de monólogos que habla del reencuentro. Será en Trui Teatre el próximo 25 de noviembre, por partida doble, a las 19.00 y 22.00.
¿Cuáles son las líneas maestras de ‘Mentes peligrosas'?
El objetivo principal es que la gente se lo pase bien, el argumento gira en torno a una fiesta de reunión de antiguos alumnos.
Pepe Rubianes detestaba a los cómicos que iban de cómico por la vida, ¿por que lado circula usted?
Yo voy con Pepe Rubianes, no me gusta el ‘trabajo extra'.
Vuestro espectáculo es una radiografía deformada de la realidad... ¿Es la realidad el mejor motor creativo?
Sí, siempre, por eso decimos que la realidad supera a la ficción.
¿El humor debe aspirar a incomodar sin ofender?
Bueno, no sé si incomodar es la palabra, pero al menos debe aspirar a hacernos reflexionar, a servirnos de catarsis. Si soportamos el drama de la vida es porque tenemos el humor.
¿No cree que esta sociedad se está pasando a la hora de ponerle límites al humor? Siempre he pensado que hacer reír requiere de una cierta perspectiva subversiva…
Por supuesto, el espíritu del bufón es ese. Creo que hoy al que arriesga en el humor la sociedad le está poniendo muchas trabas.
¿Quien pone más límites al humor, la izquierda o la derecha?
No sabría qué decirte, es una pregunta curiosa. Creo que la derecha está en un momento de arriesgar, va un poco descontrolada.
¿Conoce algún político que tenga madera de humorista?
Bueno, lo que hizo Zapatero antes de las generales fue bastante ‘monologueable'. Me gusta que aborden su ideología desde el humor en vez desde la rabia y la crispación, a veces me gustaría que nuestros políticos fuesen más serios.
¿Hasta qué punto determinados políticos creen que la gente es gilipollas?
Hasta un punto muy elevado. Diría que entre cero y diez un nueve. Creo que los políticos nos tratan con muy poco respeto.
¿Cree que la clase política es, por definición, carne de meme?
Lo es cualquiera que defiende un cargo público.
¿Cree, como afirmaba Ignatius Farray, que ‘la derecha se aprovecha de nuestra realidad y la izquierda de nuestras fantasía'?
Estoy totalmente de acuerdo. Y también comulgo con otra frase suya muy buena: ‘nos están robando el punk'.
¿El público es la brújula o lo son las críticas?
El público es la brújula, trabajamos para el cliente y si no funciona poco importa que tengas buenas críticas.
Hacer reír es... ¿un don o un trabajo?
Creo que son las dos cosas, aunque es más un don, porque el cómico es difícil que se haga. Hacer reír es un fin, la misión, y al mismo tiempo en mi caso se ha convertido en el trabajo del que vivo.
Complete la frase: Para Eva Hache el humor fue una forma creativa de escapar de…
La vida.
La vida mancha...
Totalmente.