Sóller se ha convertido en uno de los epicentros de las quejas por la masificación y saturación turística en Mallorca. Los atascos, el colapso en los accesos a la localidad y en el túnel de Sóller y la carretera que la conecta con Palma y la gran cantidad de visitantes que pueblan sus calles y el Port en temporada alta, han colmado la paciencia de vecinos y residentes, que con diferentes acciones han mostrado su preocupación y malestar por una problemática de difícil solución a corto plazo.
Las fiestas de Sóller, con el Firó en el horizonte, agravarán la situación durante los primeros días del mes de mayo, aunque el hartazgo de los 'sollerics' ya resulta patente. Lo han trasladado a través de los medios de comunicación y las redes sociales, además de otros canales de comunicación, pero a pie de calle, además de ser tema de conversación, esa inquietud ya forma parte del paisaje.
La muestra son pancartas que han aparecido con diferentes lemas o expresiones en diferentes puntos de la localidad, siendo llamativas las que muestran un llamativo 'SOS Sóller', que resume perfectamente el sentir de los habitantes de la localidad, donde la llegada de la temporada turística activa todas las alarmas entre los vecinos, a la par que se reabren negocios y establecimientos, de manera especial en el Port, lugar también de visita obligada.