La Fàbrica Nova de Sóller, uno de los pocos testimonios que quedan de la importancia de la industria textil en el Valle y la única fábrica de tejidos de Mallorca que conserva todos sus componentes arquitectónicos y gran parte de su maquinaria, será adquirida por el Consell de Mallorca con cargo a su remanente de tesorería. Fuentes del Consell han informado que se han destinado tres millones de euros del remanente a esta adquisición con la intención de que el edificio, que actualmente se encuentra en muy mal estado, pueda también ser rehabilitado. La intención del Consell es que la Fàbrica Nova aloje en el futuro un museo dedicado a la industria textil, según la institución insular.
La decisión responde a una petición municipal realizada el año pasado, puesto que el Ajuntament se enfrenta a una demanda de expropiación forzosa por parte de la propiedad de la fábrica, que en caso de prosperar no podría asumir. El Consell realizará una tasación para establecer el importe de la compra.
Se trata en todo caso de una vieja reivindicación municipal, aunque hay que recordar que el Ajuntament llegó a ser propietario de la mitad indivisa del inmueble, propiedad que perdió hace unos años por no haber cumplido con la obligación de rehabilitar el edificio a su cargo en el plazo estipulado en el testamento de Adela Oliver, antigua propietaria. Ahora, la Fàbrica Nova pertenece al resto de los herederos, un total de 13 personas, que intentaron llegar a un acuerdo con la Administración y posteriormente presentaron demanda de expropiación.
Singular
La adquisición y rehabilitación de la Fàbrica Nova por parte del Consell evitará que el municipio tenga que afrontar este gasto y recuperará el inmueble para el pueblo y para su uso cultural, preservando su gran valor patrimonial e histórico. Desde el Consell se recuerda que el edificio fue declarado en 2018 como bien de interés cultural (BIC) y que está incluido en el catálogo de los «100 elementos del patrimonio industrial de España», del Plan Nacional de Patrimonio Industrial.
Parte de la maquinaria de la fábrica se conserva todavía en sus instalaciones y también utensilios y maquinaria procedentes de otras fábricas solleriques desaparecidas, como La Solidez y Ca les Ànimes. El Consell ha valorado que el hecho de que se haya conservado in situ gran parte de la maquinaria original otorga al conjunto un valor patrimonial singular, puesto que permite una comprensión y lectura más integradora de todo el conjunto fabril.
Esta maquinaria, tanto en el estudio elaborado por la Unidad de Patrimonio Histórico e Industrial del Servicio de Patrimonio Histórico, como en la ficha en el catálogo de bienes patrimoniales de Sóller, se considera que debe quedar vinculada a la Fàbrica Nova y, por tanto, formaría un conjunto indivisible con el conjunto edificado, disfrutando también de la declaración de BIC.
Actualmente, el edificio sufre un acelerado proceso de degradación, por lo que esta compra es clave para asegurar su futuro.
Remanente de tesorería = Os sangramos y no sabemos en qué gastar la pasta.