Acabado el ultimátum dado por la propiedad, sus representantes legales y la empresa de desokupación contratada a tal efecto, estos últimos han accedido al edificio Neptuno II, okupado desde hace semanas dentro del complejo Bellevue, en el Port d'Alcúdia, con el fin de instar a la docena de personas que se resiste a abandonarlo a hacerlo, una vez que ha expirado el plazo otorgado para evitar emprender acciones legales contra ellos, abriéndose un proceso judicial en defensa de los intereses de la propiedad.
Cinco familias con menores a su cargo han optado por acogerse a la oferta realizada por el Ajuntament d'Alcúdia, que les ofrece alojamiento en un hostal por espacio de un mes, con la premisa de encontrar un nuevo hogar y trabajo, en los casos que corresponda esto último. El resto de personas, bien ha abandonado el bloque durante la mañana de este lunes el bloque o se resiste a hacerlo, mientras algunas sigue sacando sus enseres de los apartamentos.
Efectivos de la Guardia Civil se han personado en la zona sobre la hora fijada para el desalojo pacífico del edificio. Los mismos han identificado a varias personas que estaban por la zona, entre ellas representantes del Sindicat Habitatge de Palma, mientras los abogados anunciaban que iban a denunciar a las personas que siguieran allí dentro una vez expirado el ultimátum de una semana dado el pasado 17 de febrero, cuando la empresa de desokupación, a instancias de la propiedad (BlueBay Hotels & Resorts) hizo acto de presencia.
Este lunes, han reforzado la presencia de Guardians Control para proceder a la entrada en el edificio y los apartamentos e informar a los okupas de que se iba a actuar contra ellos en caso de no abandonarlo. Uno a uno, fueron entrando por la fuerza en los habitáculos, violentando la puerta (muchas de ellas con candados y cerraduras instaladas por los propios okupas en las tres plantas), e invitándoles de salir y, en caso de no hacerlo, advertirles de las consecuencias legales que tendría para ellos.
De la misma manera, algunos de los okupas han denunciado agresiones y coacciones por parte de los desokupas durante los últimos días, lo que ha incrementado la tensión en el Bellevue, donde la presencia de estas personas ha convertido el gigante complejo hotelero del Port d'Alcúdia en centro de la noticia durante las últimas semanas.