El espíritu binissalemer del Vermar continúa muy vivo y esta noche de jueves se ha podido comprobar en la cena de fideus en Can Arabí, un evento que cumple cuarenta años y que tuvo que suspenderse en 2020 y 2021 por culpa de la pandemia.
Más 3.000 personas se han acercado a Can Arabí para disfrutar de los fideus de Vermar que elaboran desde la Associaciò d'Amics de la Tercera Edat de Binissalem. Desde el Ajuntament han pedido a los asistentes que no utilicen los vehículos particulares porque las lluvias de los últimos días han embarrado las zonas de aparcamiento, aunque ha habido quien ha hecho caso omiso a pesar de poder desplazarse a pie sin ningún tipo de problema. Tampoco han faltado los particulares que han subido sus propias sillas y mesas para asegurarse un sitio entre la multitud.
El cocinero jefe, Paco Reynés, ha explicado que «para esta ocasión hemos preparado unos 260 kilos de carne de oveja y 240 kilos de fideos». Como manda la tradición, las bodegas José L. Ferrer colaboran con la cena aportando sus vinos. Además, la Agrupació Escolta Pedra Viva ha vendido cocas para completar el menú. La ambientación musical la han puesto los Xeremiers de Binissalem y, una vez acabada la cena está programado un baile popular.
La afluencia en esta XL Festa de Fideus de Vermar en Can Arabí ha sido un tanto inferior a la registrada en 2022, cuando había muchas ganas tras dos años sin poder celebrar el evento. Además en esta ocasión se han cambiado los precios de los tickets para poder asistir a la cena. Mientras que los empadronados en Binissalem han pagado un euro, aquellas personas procedentes de otros municipios han tenido que abonar cinco euros. El Ajuntament tomó esta medida para controlar la masificación que se había registrado en las últimas ediciones.
La fiesta seguirá en la noche del viernes con el multitudinario Sopar a la Fresca por las calles de Binissalem, otro de los eventos de referencia dentro de una de las últimas fiestas del verano mallorquín.