La demolición de las construcciones ilegales de Ruberts ha comenzado.
Una pala excavadora y una decena de operarios de MAB, la empresa que se hace cargo de los trabajos, empezaron a derribar este lunes los cimientos de los cuatro adosados ilegales que se iban a levantar en el llogaret de Sencelles, junto al poblado talayótico de Es Fornàs.
Al inicio del derribo se acercaron algunos vecinos y el alcalde y el teniente de alcalde de Sencelles.
Los trabajos de derribo y restitución del solar finalizarán previsiblemente dentro de dos semanas.
Financiadas exclusivamente por el Ajuntament de Sencelles, cuentan con un presupuesto de 34.000 euros.
Lo que más tiempo requerirá será el relleno y nivelamiento del solar, que ahora es una gran hondonada. A medio plazo se convertirá en un aparcamiento.
El caso de los adosados de Ruberts tiene el origen en la normativa urbanística de Sencelles de 1995, que preveía un crecimiento importante para el pequeño llogaret. A raíz de una demanda de la asociación de vecinos contra varias promociones, la Justicia declaró en 2007 «nula» esta normativa.
La sentencia implicaba demoler siete adosados, pero se ha alcanzado un acuerdo para que los tres ya acabados y habitados se preserven y únicamente se derriben los cuatro inacabados.