El consejo de administración de la empresa municipal Calvià 2000 SA ha acordado presentar un contencioso administrativo contra el acuerdo de la Junta de Gobierno del Ajuntament d'Andratx, que declara la no conformidad de una de las facturas emitida por Calvià 2000, por la recogida selectiva de residuos que gestiona en dicho municipio, por un valor de 31.121 euros, y que vendría a compensar la diferencia entre costes de la recogida efectuada y los ingresos de su venta.
El pleno del Consistorio de Calvià aprobó en junio de 2012 un convenio con Andratx, mediante el cual Calvià 2000 asumía la recogida selectiva del municipio de Andratx sin costes para el municipio vecino durante un año. Sin embargo, según la portavoz municipal del PP y presidenta de la empresa Calvià 2000, Cristina Tugores, en ese mismo pleno, esta decisión no supondría tampoco «ningún coste para el Ayuntamiento de Calvià».
Denuncia de la oposición
El PSOE, en la oposición denunció en el plenario que el equipo de gobierno que preside el alcalde Manuel Onieva que el convenio era «nefasto» para los intereses de Calvià ya que «vamos a recoger los residuos en Andratx gratis total, mientras que en nuestro municipio todos nuestros vecinos pagan carísimo».
Con la renovación de dicho convenio en mayo de 2013, el PSOE presentó una moción para evitar prorrogar en esas condiciones dicho convenio, pero se impuso la mayoría absoluta del PP.
En esta situación, y «ante la reiterada ausencia de informes económicos detallados y serios que justificasen el convenio», según el portavoz socialista Alfonso Rodríguez Badal, el PSOE de Calvià presentó un contencioso administrativo contra dicho acuerdo, al entender que se vulneraba la ley de contratos del Sector Público y no suponía ninguna ganancia para Calvià.
Los socialistas nunca entendieron que Calvià 2000 contempla más de dos millones de euros para la recogida selectiva en el municipio de Calvià percibiendo por la venta del papel o vidrio reciclado únicamente 350.000 euros, generando un déficit de 1.860.000 euros «que debemos pagar los contribuyentes y que nos digan que en Andratx se sufraga solo con la venta de lo reciclado». Sin embargo ahora aparece una factura de Calvià 2000 pretendiendo cobrar 31.121 euros que, al parecer, sería por el déficit generado entre los costes de la recogida y la venta del papel y vidrio, pero que, en base al convenio, el Consistorio andritxol se niega a pagar.
Para los socialistas «la inoperancia y el absoluto descontrol del equipo de gobierno obliga a los calvianers a asumir ahora el coste de un contencioso que se hubiera evitado si se hubieran atendido las propuestas socialistas, y que tiene pocas posibilidades de salir adelante pues la redacción del convenio no recogía indemnizaciones económicas».