La Serra de la Tramuntana ya forma parte de la Lista del Patrimonio Mundial de la Humanidad. Todo el trabajo realizado durante estos tres años finalmente ha conseguido su objetivo.
La Serra, única candidatura española presentada este año al comité, fue elegida en la categoría de paisaje cultural. La selección tuvo lugar ayer en París, de entre las 35 candidaturas que se presentaban, para ser incluida dentro de la lista de lugares catalogados por la Unesco como paisaje cultural por los valores paisajísticos, culturales, históricos y etnológicos.
De este modo esta zona de Mallorca se incluye por mérito propios entre los 878 parajes del mundo declarados patrimonio mundial. Una decisión que ha tenido en cuenta los elementos que avalaban su candidatura como son su gran riqueza de flora y fauna, su valor paisajístico, los distintos pueblos que la conforman, las fincas rústicas, las possessions, los centros religiosos, la herencia marítima, las costumbres, las formas de vida tradicionales y sus valores etnográficos y artísticos.
La Unesco ha sido muy exigente en todo el proceso de la declaración, reclamando, entre otras cosas, la delimitación concreta del elemento propuesto, que tiene que tener la máxima protección legal, así como un Plan de gestión que asegure la conservación de este elemento. Éstas y otras peticiones han sido cumplidas por la propuesta de la Serra de Tramuntana.