Cuatro de las personas que fallecieron en el trágico accidente mortal ocurrido este sábado por la tarde en Maó no llevaban puesto el cinturón de seguridad, según señalan fuentes de la investigación. Estas personas eran las que viajaban en el asiento de atrás: la mujer, de 46 años y tres menores. Por su parte, el conductor y la copiloto, su hija de 16, sí lo llevaban puesto.
Fuentes de la Guardia Civil también apuntan que el siniestro se produjo a causa del exceso de velocidad. Según indican, el vehículo pasó por encima de la rotonda y terminó estrellándose contra el muro. También se apunta que el conductor tuvo un problema de salud.
El conductor tenía 52 años y la mujer, de 46; mientras que los cuatro menores tenían edades comprendidas entre los 9 y 16 años; viajaban en el asiento de atrás. Todos los fallecidos son de nacionalidad española, residentes en Maó, de los que tres menores eran hijos de la mujer y el otro, del hombre que conducía el coche.