La Lista del Patrimonio Mundial cuenta desde hoy con cinco nuevos sitios de España, Siria, Emiratos Arabes Unidos, Irán, Turquía y un sexto colectivo presentado por Suiza, Alemania, Austria, Eslovenia, Francia e Italia, informó la UNESCO.
Estos seis países presentaron conjuntamente «Los Palafitos del entorno de los Alpes», mientras que España entró en la prestigiosa lista con «El paisaje cultural de la Serra de Tramuntana», en la isla de Mallorca, en las Baleares.
Los otros lugares inscritos fueron «Las aldeas antiguas del norte de Siria"; «Los sitios culturales de Al Ain: Hafit, Hili, Bidaa Bint Saud y zonas de los oasis», de los Emiratos Arabes Unidos; «El jardín persa», de Irán; y «La Mezquita y complejo social de Selimiye», en Turquía, precisó la UNESCO en un comunicado.
Del Paisaje Cultural de la Serra de Tramuntana (España), subrayó su situación «en las abruptas laderas de una cadena montañosa paralela a la costa noroccidental de la isla» y cómo los escasos recursos de agua del lugar no impidieron su agricultura milenaria, gracias a una red articulada de origen feudal que permitía gestionar el agua entre las distintas parcelas existentes.
Del Jardín persa, «concebido como un símbolo del Edén y de los cuatro elementos zoroástricos», la UNESCO subrayó que es un gran ejemplo de la diversidad del arte paisajístico persa y de su evolución para adaptarse a condiciones climáticas, sin perder sus principios fundamentales, que se remontan a los tiempos de Ciro el Grande (siglo VI antes de Cristo).
Este sitio iraní, que cuenta igualmente con edificios, pabellones, murallas y sistemas de regadío complejos, influyó notablemente en el arte de la jardinería paisajística llegó a extenderse hasta la India y España, añadió la UNESCO.
De las 40 antiguas aldeas del norte de Siria, construidas entre los siglos I y VII y abandonadas de los siglos VIII al X, recordó que están agrupadas en ocho parques arqueológicos y constituyen un «notable testimonio de la vida rural en el periodo de la Antigüedad tardía y la época bizantina».
Destacó, asimismo, el buen estado de conservación de su paisaje cultural y de los vestigios arquitectónicos de viviendas, templos paganos, iglesias, cisternas, baños termales y otros edificios.
Los «Sitios culturales de Al Ain: Hafit, Hili, Bidaa Bint Saud y zonas de los oasis (Emiratos Arabes Unidos) conservan huellas de culturas protohistóricas, entre ellas tumbas circulares de piedra, de 2.500 años antes de Cristo, pozos y numerosas construcciones de adobe, como edificios residenciales y administrativos, torres y palacios, subrayó la nota.
Hili es también «uno de los ejemplos más antiguos del sofisticado sistema de riego aflaj, que data de la Edad de Hierro», además de tener importantes testimonios de la transición de culturas de la región, de la caza y la recolección a la sedentarización.
Construidos por Sinan, el más célebre de los arquitectos otomanos del siglo XVI, la Mezquita y el complejo social de Selimiye que dominan en Turquía el perfil de la ciudad de Edirne, antigua capital otomana, incluyen dentro de su conjunto arquitectónico un mercado cubierto, la casa del reloj, un patio exterior, una biblioteca y varias escuelas coránicas (madrazas).
De los 111 lugares -de ellos 56 en Suiza- incluidos en el «conjunto único» de «Los Palafitos del entorno de los Alpes», la UNESCO resaltó los vestigios de asentamientos humanos prehistóricos, «excepcionalmente bien conservados», en viviendas edificadas sobre pilotes (palafitos) entre el V milenio y el siglo V a.C. a orillas de lagos, ríos y pantanos.
Las excavaciones arqueológicas realizadas ya permitieron comprender mejor la vida diaria del hombre del Neolítico y de la Edad de Bronce en la Europa Alpina, así como de su interacción con el medio ambiente.
El Comité del Patrimonio Mundial que examina las 35 candidaturas presentadas en 2011 concluirá su 35 reunión el próximo miércoles.