El Ajuntament de Sineu ha restringido el paso por el camino de Son Corb a los vehículos que superen las 10 toneladas, colocando señales de prohibición a lo largo de la vía. Esta restricción del paso afectará básicamente a los camiones de gran tonelaje que realizan tareas de carga de mercancía en la cantera y a los que los vecinos del camino de Son Corb ven como culpables del deterioro y de los destrozos que acumulan las paredes colindantes con la vía de Sineu.
De hecho, desde el 2006 se han ido sucediendo las denuncias por las molestias ocasionadas por la cantera. Ahora, los vecinos ven con buenos ojos las medidas tomadas por el Consistorio porque creen «preservaran el camino» aunque confiesan creer que «no serán definitivas».
«No se puede cerrar el paso indefinidamente a los camiones que tienen licencia y según nos explicó el Ajuntament cuando el dueño de la pedrera repare los desperfectos la prohibición desaparecerá» explica una vecina. Mientras la policía local vigila diariamente la zona, impidiendo el paso a los camiones que infringen la norma.