C. VENY
El compromiso del equipo de gobierno de Antoni Pastor de demoler
los dos últimos monumentos franquistas de Porto Cristo a través de
una partida de 150.000 euros en los presupuestos de 2005, tendrá
que esperar. La demolición del monumento más próximo a la primera
línea de la costa de Porto Cristo está pendiente del permiso de la
Demarcación de Costas. En este sentido, el Ajuntament ha reclamado
la concesión del permiso para proceder a la demolición lo más
rápido posible. Por su parte, el otro monumento a los caídos del
bando nacional del final de la avenida de los Pinos será demolido
tan pronto se haya modificado el proyecto. Inicialmente, el
presupuesto de contrata para la demolición del monumento ubicado en
una plaza que lleva el mismo nombre al final de la avenida de los
Pinos, era de poco más de 150.000 euros.
Después, el equipo de gobierno decidió modificar el proyecto con el objetivo de abaratar la intervención. Ahora, los 150.000 euros servirán para demoler definitivamente ambos símbolos del régimen franquista. Este extremo fue confirmado ayer por el delegado de Porto Cristo en el Ajuntament de Manacor, Jaume Brunet. La decisión de demoler los dos últimos monumentos del régimen que aún quedan en el municipio, responde a un acuerdo de pleno que se adoptó por unanimidad durante la pasada legislatura, siendo alcalde Miquel Riera. Ahora, el pacto (PP-AIPC), ha asumido compromiso de eliminar ambos monolitos en virtud del acuerdo de pleno del 14 de febrero de 2003.
La voluntad de borrar de la historia ambos monumentos coincide con las declaraciones llevadas a cabo por la hija del alcalde asesinado Antoni Amer de no declararlo hijo ilustre de Manacor, mientras no se derriben estos emblemas.