Todo está a punto para que den comienzo las obras de restauración de la iglesia parroquial de Sant Pere i Sant Pau de Algaida, sin duda uno de los edificios más emblemáticos del patrimonio histórico y artístico del pueblo. Se trata de un proyecto que contempla varias actuaciones, que suponen una inversión cercana a los 50 millones.
La recientemente constituida ONG Algaida Solidària ha promovido una cena a fin de obtener fondos que contribuyan a financiar la costosa restauración, que también cuenta con una subvención del Govern de les Illes Balears. Este acto solidario ha sido anunciado para el próximo sábado día 15, a partir de las 20.30 horas, en los locales de sa Portassa de la calle Pare Bartomeu Pou. Los tiquets, 2.000 pesetas por persona, se pueden adquirir en comercios y oficinas del Ajuntament. La cena consistirá en una gran «pamboliada».
El templo parroquial será objeto de complejas intervenciones de rehabilitación. En este sentido, está previsto una cuidada restauración del campanario, la renovación del tejado, instalación de un pararayos, arreglo de una campana agrietada y acondicionamiento del techo de la sacristía, que amenaza desplome, entre otras actuaciones.
El rector de la iglesia de Algaida, Antoni Riutort, mostró su satisfacción por la cena organizada por Algaida Solidària con el objetivo de recaudar beneficios. Riutort explicó que desde hace años se preveía que era necesaria una restauración del edificio religioso. Uno de los hechos detonantes que propició el aceleramiento del proyecto fue que hace dos años cayó en plena calle una bola de piedra que decora el campanario. El ornamento causó un fuerte golpe en el asfalto y, en consecuencia, el degradado estado de la estructura provocó cierta inquietud vecinal. Riutort reconoció que se asustó: «Estaba muy cerca. El ruido pareció el de una bomba. Si llega a caer sobre alguien lo mata».