La llegada de cruceros al Puerto de Palma crecerá en 2025. La Autoridad Portuaria de Baleares (APB) tiene prevista la escala de 541 cruceros entre enero y diciembre de este año de los que desembarcarán más de 1,8 millones de pasajeros. Son 47 barcos y 41.085 cruceristas más que la temporada pasada.
El número de escalas aumenta por segundo año consecutivo aunque sigue sin alcanzar los valores prepandémicos. El máximo histórico se registró en 2019. Aquél año recalaron en el puerto de la capital balear 592 barcos repletos de cruceristas. Se inició entonces un movimiento popular que alertaba del impacto de este tipo de turismo sobre el territorio y reclamaba limitar la afluencia de los llamados megacruceros, que tienen capacidad para albergar a más de 5.000 pasajeros.
En diciembre de 2021 (año que se cerró con solo 167 escalas), el Govern anunció un acuerdo histórico con las navieras que frenaba la llegada de megacruceros a Palma. El pacto que se firmó en Hamburgo limitaba las escalas a partir de 2022. Según ese documento, solo pueden coincidir al mismo tiempo en Palma un megacrucero y otros dos buques de menor tamaño. Se establecía también por primera vez un límite semanal de cruceristas a razón de 8.500 personas al día. Los barcos de menos de 500 plazas no computan para la limitación.
Para el Govern el acuerdo alcanzado implicaba una «reducción efectiva» del número de escalas que se trasladaría también al número de visitantes, pero lo cierto es que el número de escalas solo decreció en 2023, un 3,39 % respecto al año anterior.
Previsiones
El 2025 arranca con 14 cruceros programados en enero, uno menos que hace un año y con una caída de casi 13.000 pasajeros, tendencia que continuará en febrero con diez escalas (una menos que en 2024) y 31.328 pasajeros menos.
La situación cambiará a partir de marzo con 21 escalas previstas (tres más que hace un año) y más de 78.000 pasajeros (15.865 más que en 2024). Los mayores desembarcos se producirán en octubre, mes en el que llegarán al Puerto de Palma 82 cruceros (veinte más que en el mismo periodo del año anterior) con un total de 271.299 cruceristas. Si dividimos esta cifra por los 31 días del mes el resultado (8.751 personas) supera el límite de 8.500 personas por semana y día que estableció el acuerdo con el Govern en 2021. No obstante hay que tener en cuenta que los pasajeros que viajan en barcos de manos de 500 plazas no computan según el acuerdo
En cualquier caso lo que ocurra este año será clave para determinar las políticas del futuro. El pacto de Hamburgo, suscrito en 2021, tenía una vigencia de cinco años por lo que pronto caducará.
La Comisión Parlamentaria de Turismo, Comercio, Trabajo, Cultura y Deportes aprobó el pasado mes de mayo una Proposición no de Ley (PNL) para instar al Govern a retomar el diálogo con las navieras y consignatarias de cruceros turísticos para renovar aquél acuerdo.
Las entidades conservacionistas acusan a las navieras de incumplir el acuerdo vigente y abogan por un modelo de regulación alternativo similar al que funciona en Venecia. Desde agosto de 2021 los barcos de más de 180 metros de eslora y más de 25.000 toneladas brutas, que superen los 35 metros de altura y emitan más de un 0,1 % de azufre, tienen prohibida la navegación en sus aguas.