El grupo municipal Vox Palma ha enviado este martes un oficio al alcalde Jaime Martínez para que no se permita la conferencia que se impartirá este jueves en la biblioteca de Cort, impartida por Ciutadans per Palestina bajo el título 'Palestina más allá de los mitos de Israel'. «Justificamos esta petición en el acuerdo del día 30 de mayo aprobado en el pleno. Y nos hacemos eco de la preocupación expresada por las bibliotecarias en aquella ocasión, cuando se celebró la conferencia por el antropólogo Francisco Gil-White, cuando manifestaron que la biblioteca pública es una institución esencial para impulsar la paz y el bienestar espiritual en la mente de los seres humanos». La conferencia de Gil-White, conocida por ser claramente pro-sionista, se llevó a cabo en medio de fuertes medidas de seguridad y protestas a favor de Palestina a las puertas de Cort.
Desde Vox Palma señalaron que la conferencia que se celebrará este jueves ya fue impartida el pasado 19 de abril por la misma organización y durante la misma se vertieron afirmaciones de enaltecimiento del terrorismo, banalización del holocausto y discurso de odio dirigido hacia los judíos, en una clara muestra de antisemitismo. Dicha organización tuvo que ser desalojada del rectorado de la UIB, cuyas dependencias había ocupado ilegalmente.
La formación de ultraderecha reclama a Jaime Martínez que, tal y como se votó en el pleno, con el apoyo del PP, PSOE y Vox, «no se permita una actividad incompatible con los valores de convivencia que deben primar en cualquier ayuntamiento».
Vox denunció que en la conferencia del 19 de abril de Ciutadans per Palestina, se vertieron informaciones constitutivas de delito de odio, enaltecimiento del terrorismo y humillación de sus víctimas, banalización del Holocausto y llamada al genocidio del estado de Israel y la desaparición de dicho Estado. Así, Vox, advirtió que en la citada conferencia, Ciutadans per Palestina hizo afirmaciones como «Hamás es un movimiento legítimo», «si venís con la idea de condenar a Hamás, aquí no lo escucharéis», «el 7 de octubre fue una respuesta a las bases de colonialismo humano de Israel», «Hamás da soluciones allí donde las soluciones son más difíciles. Pedir a Hamás que deje las armas es una petición de suicidio».
La formación de ultraderecha también denunció que en la citada conferencia de la UIB, se señaló que, sobre Hamás y la masacre y secuestro de civiles del 7 de octubre de 2023 llevada a cabo en Israel, «hoy en día han activado junto a otras organizaciones armadas, la sala de operaciones conjuntas, que es la que se encargó de la respuesta al 7 de octubre, como sabéis, fue un ataque a las bases militares, comunicativas y también humanas del colonialismo israelí». Vox también denuncia que la citada organización hizo afirmaciones como «acerca del Holocausto, se trataría de un mito con el que Israel pretende justificar la ocupación de Palestina».
La formación de ultraderecha señaló que esta misma organización impulsó la llamada Acampada per Palestina, que finalizó tras la ocupación ilegal del rectorado por parte de sus integrantes, debido a que la UIB no accedió al boicot del Banco de Santander, tal y como exigían los acampados. «La UIB se vio obligada a desocuparlos. Teniendo en cuenta lo anterior, parece obvio que una conferencia bajo el mismo título e impartida por la misma organización, contendrá los mismos discursos de odio ya citados, ya que, que se sepa, no solo no han abjurado de los mismos sino que los han radicalizado».
Por su parte, Neus Truyol, regidora de Més, advirtió que «llevar a cabo la propuesta de Vox supondría una censura a la actividad. Las bibliotecas y otros espacios municipales son los lugares de de libertad de expresión. Y estas amenazas constantes contra lo que está padeciendo el pueblo de Palestina con un genocidio en directo es es absolutamente vergonzoso e indignante». Esta es una actitud clara del fascismo y autoritarismo que quiere implantar Vox en todas las instituciones y los espacios públicos. No lo podemos permitir», zanjó Truyol.
Lucía Muñoz, de Podemos, denunció que ya habían avisado que la moción de Vox que se presentó en el último pleno, «era un miserable intento de seguir confundiendo antisemitismo con antisionismo y se iba a instrumentalizar para censurar al movimiento de solidaridad con Palestina que está denunciando el genocidio perpetrado por Israel. Los votos del PSOE en Palma han servido en este caso para legitimar la censura al movimiento de solidaridad con Palestina. Los compañeros y compañeras judías antisionistas llevan muchos años encabezando el movimiento de solidaridad y la instrumentalización del antiseminismo».