Los vecinos del Paseo Marítimo se despertaron este martes por la mañana con el ruido de las motosierras. Las obras de remodelación de esta importante vía se han llevado por delante una docena de palmeras que estaban situadas junto a la discoteca Social Club y el puente del edificio Bahía Mediterráneo. «Se está cometiendo un crimen», señalaron vecinos de los edificios colindantes, mientras una residente denunciaba a este periódico que «son unas palmeras icónicas y las están cortando. Es una masacre, un crimen. Están aquí desde que se construyó el Paseo Marítimo». De hecho, esta zona se creó en la década de los 50 pero no fue hasta finales de los 70 cuando contó con seis carriles en total para acoger al tráfico rodado.
«Hay gente llorando. Han empezado a talar las palmeras y han eliminado este oasis. ¿Por qué no las han trasplantado?», se preguntaban los vecinos, que lamentaban que «se ha hecho sin consultar y seguro que luego nos pondrán unos árboles birriosos y enanos como han hecho en otros puntos de la ciudad».
Fuentes de la Autoritat Portuària de Balears (APB) señalaron que «las palmeras no se han podido trasplantar». De hecho, una parte fundamental del proyecto de reforma de esta zona es el incremento de zonas verdes, ya que está planeado que haya 37.000 metros cuadrados de parterres con diferentes plantas y arbustos. Además, se plantarán más de 500 palmeras y 1.800 árboles de 21 especies diferentes. En el proyecto inicial estaba previsto «intentar salvar o trasplantar el máximo de ejemplares ya existentes en el espacio a remodelar».
Por otro lado, desde la APB señalaron que el derribo del puente se llevará a cabo «próximamente». Esta operación, que es una parte importante de la remodelación del Paseo Marítimo, se llevará a cabo después de la reciente expropiación de la discoteca Social Club, que está en las inmediaciones, además del puente que conecta el edificio de viviendas con la piscina. El objetivo es ganar todo ese espacio para convertirlo en una zona verde.
Por otro lado, la APB informó que este martes se detectó una fuga en la tubería de impulsión de aguas residuales, lo cual requirió el cierre de uno de los carriles de la calzada en sentido aeropuerto, a la altura de las estaciones marítimas de Paraires. El otro carril permanecerá habilitado para el tráfico. Los trabajos necesarios para localizar y reparar la fuga podrán completarse en un día, aunque la duración exacta dependerá del alcance de la avería. La APB lamentó las molestias.