Las colas de coches que intentan sortear los altos precios del aparcamiento de la terminal de Llegadas del aeropuerto de Son Sant Joan podrían tener fin este año. Así lo confirmó ayer el regidor de Mobilitat, Antonio Deudero, que advirtió que «vamos a ponerle solución este verano». Una de las opciones que se están barajando, según ha podido saber Ultima Hora de fuentes próximas al cuartel de San Fernando, es la instalación de cámaras al estilo de las zonas ACIRE.
De esta manera, se podrían registrar las matrículas de los vehículos estacionados de manera indebida en el arcén y, si se repite el modelo ACIRE, podrían imponerse multas a aquellos coches que estén incumpliendo la normativa. Aunque aún no ha concretado las medidas que se llevarán a cabo esta temporada alta, Deudero advirtió ayer que «estamos teniendo reuniones de coordinación, trabajamos en el tema y hemos mirado varias opciones». Ajuntament de Palma, Policía Local y el aeropuerto se están reuniendo para buscar una solución.
Fuentes de la Policía Local corroboraron que ya se han llevado a cabo varias reuniones con los responsables de Son Sant Joan y aún no se sabe si se impondrán sanciones. Aún así, se esperan instrucciones para intentar buscar una solución.
Desde abril
En plena temporada alta, que ya se empieza a hacer notar en abril, y con la actividad aeronáutica en apogeo, son decenas los coches que quieren esquivar el estacionamiento de aeropuerto para evitar el pago.
En la terminal de Llegadas solo es gratuito el aparcamiento express en los primeros 10 minutos de estancia. A partir de entonces, el coste por dos minutos extra alcanza los dos euros. Así lo confirman la multitud de quejas que aparecen en las reseñas de internet de este aparcamiento, muchas de ellas muy recientes, en las que tildan de «estafa» las tarifas de este estacionamiento impuestas por AENA. Muchos usuarios lamentan que tienen que hacer un uso habitual del aeropuerto y advierten que «con estos precios, no es de extrañar que la gente haga colas delante de los accesos del párking».
Los atascos en las vías de acceso a la terminal fueron el pan de cada día el verano pasado, provocando conflictos con taxistas y autobuses que tenían dificultades para acceder a las áreas de estacionamiento. Las retenciones eran tan largas que se provocaban caravanas y muchos vehículos se veían forzados a frenar de golpe para evitar una colisión. Y estos vehículos permanecen estacionados pese a que AENA colocó barreras. Una medida que no sirvió para nada.