La Oficina de Antidesahucios ampliará su plantilla para acoger el servicio de Antiokupación. Tal y como se pactó con Vox, el equipo de gobierno del Ajuntament de Palma atenderá a los afectados por viviendas okupadas aunque aún no hay fecha de apertura. Según el regidor de Urbanisme, Óscar Fidalgo, la Oficina de Antidesahucios «se va a reforzar y va a prestar nuevos servicios. Estamos trabajando con el departamento de Antidesahucios y se llevarán a cabo otros servicios beneficiosos para la vivienda. Vamos a poner más medios». Entre estas medidas estaría seguramente «posiblemente la llegada de más trabajadores».
Fidalgo advirtió que la Oficina de Antidesahucios se reorganizará y reconoció que hasta ahora no ha visitado este departamento desde el inicio de la legislatura, ya hace ocho meses. «Yo hablo con el jefe del departamento de Vivienda», dijo el regidor, justificando que no haya acudido a este departamento que nació hace ocho años para buscar una solución a los problemas de vivienda que sufren los palmesanos y que dirige Marga Cladera.
El regidor de Urbanisme advirtió que no tenían ningún problema en poner en marcha la Oficina de Antiokupación, una de las condiciones que puso Vox para llegar a un pacto programático en el Ajuntament de Palma, aunque aún no hay fecha de puesta en marcha.
A la pregunta de si veía justificado la puesta en marcha de la Oficina de Antiokupación vistos los magros resultados obtenidos en Castilla y León, que se han saldado con apenas una llamada al día en toda la comunidad y siete visitas presenciales al mes, Fidalgo advirtió que en Palma «este servicio permitirá poner medios informáticos y de coordinación para la gente que recibe una presión o injerencia por inquilinos precarios u okupaciones. La usurpación de la propiedad es un problema que preocupa en toda España y a todos los ciudadanos. Se da en el caso de gente que es ingresada en el hospital o los problemas de sucursales de entidades bancarias».