El concejal de Educació de Cort, Llorenç Carrió, informó este miércoles de que el Ayuntamiento destinará a ayudas sociales el dinero del bono escolar que no se gastó el año pasado con motivo de la menor demanda habida durante el primer año de la pandemia. Como se recordará fueron 150.000 euros los que no se llegaron a gastar.
El presupuesto del bono escolar, dijo, pasó el año pasado de 270.000 a 350.000 euros, «una muestra de la voluntad del equipo de gobierno por promover esta ayuda para la escolarización de los niños de 0 a 3 años que no tienen plaza en los centros municipales».
Explicó que la convocatoria se realiza a un año vista «y como el pasado curso no fue normal eso implicó que estas ayudas no llegasen como estaba previsto a las familias, pues hubo una menor demanda». En consecuencia sí se pudo atender a todas las familias que pidieron está ayuda para la escolarización.
Sobre el dinero sobrante, el responsable municipal expuso que «por primera vez los remanentes no tienen que ir a pagar a los bancos, sino que sirven para el Ayuntamiento». Recordó la gran necesidad de las ayudas sociales que han pasado de 4 a 11 millones por lo que «entendemos que el dinero del bono escolar no se pierde sino que las ayudas se van a dar de una forma u otra a las familias que lo necesiten».
Carrió avanzó que «ahora ya se está trabajando para el bono escolar del próximo curso y en la creación de nuevas plazas públicas y la mejora de la red municipal de escoletes».
Por otro lado, el edil dio a conocer que la Junta de Gobierno aprobó la adjudicación definitiva del Programa de Intervención Social y Educativa (PISE) para los centros de Secundaria a la empresa Estudi 6.
Este programa, expuso, «está dirigido a los alumnos en riesgo de abandono escolar a los que se da una nueva oportunidad para reengancharse a los estudios y para que puedan conocer de primera mano el mundo laboral».
Este programa, que está conveniado con la Conselleria d'Educació, comenzará el próximo 1 de marzo y contará con 24 alumnos. Tendrá una duración de dos años, prorrogables a otros dos, y se ha adjudicado por un importe de 82.840 euros.
Carrió recordó que este programa se perdió en la legislatura 2011-2015 y el anterior parte de progreso lo recuperó en el curso 2017/2018, con doce alumnos.
El año pasado, afirmó, «con motivo del confinamiento fue complicado, pero se mantuvo un seguimiento en todo momento con estos alumnos».