Airbnb cerró el segundo trimestre del año con un beneficio de 555 millones de dólares (507,6 millones de euros), un 14,6% menos que en el mismo periodo del año pasado, informa en un comunicado este miércoles. Los ingresos crecieron un 11% interanual, hasta 2.750 millones de dólares (2.515,4 millones de euros), con un margen de ingresos neto del 30%.
El Ebitda registrado fue de 894 millones de dólares (817,7 millones de euros), un 9% más que un año atrás, con un margen del 33%, y la empresa generó un flujo de caja libre de 1.000 millones de dólares (914,7 millones de euros), "el nivel más alto hasta la fecha" y un 16% interanual más. La plataforma ha explicado que el descenso de los beneficios se debe a la liberación de una provisión por valuación sobre algunos activos por impuestos diferidos en 2023 y el uso de estos activos en 2024. El ceo de la empresa, Brian Chesky, ha explicado que se trata de "otro trimestre fuerte" para la empresa, y ha mostrado su orgullo por los resultados y, en sus palabras, la calidad que la plataforma continúa ofreciendo a anfitriones y huéspedes.
La plataforma superó los ocho millones de anuncios activos en el segundo trimestre del año, con crecimientos en "todas las regiones y tipos de mercado", y ha señalado que ha eliminado 200.000 anuncios que no cumplían los estándares de calidad. Ha señalado que durante el periodo ha implementado nuevas funciones, que facilitan la búsqueda de alojamientos de calidad. Por otro lado, ha celebrado que el crecimiento de la plataforma en mercados con baja penetración ha superado al de los grandes mercados.
La empresa ha explicado que el flujo de caja generado le ha permitido realizar recompras de acciones de clase A por valor de 749 millones de dólares (685,1 millones de euros). En los últimos doce meses las recompras alcanzan los 2.750 millones de dólares (2.515,4 millones de euros) y la empresa redujo el número de acciones en el mercado hasta 673 millones a cierre de junio.