Las reacciones a la decisión de Pedro Sánchez de continuar al frente del Gobierno tras cinco días de reflexión derivados de las denuncias presentadas contra su esposa, Begoña Gómez, también se han producido a escala insular, con la aportación de algunas formaciones políticas en Mallorca que han querido expresar su sentir ante el desenlace de una larga espera de cinco días.
Por un lado, el PSIB-PSOE tuvo como portavoz a su secretario de organización en las islas, Cosme Bonet, quien compareció minutos después de hacerse oficial la noticia para hablar, al referirse a la continuidad de Sánchez como «una victoria de la democracia», agradeciendo la «constancia y dedicación al proyecto de progreso de nuestro país» del líder socialista.
Considera Bonet que la decisión de Pedro Sánchez «refuerza los valores democráticos, recogiendo el sentir de la ciudadanía para que el respeto al adversario y las normas democráticas que rigen nuestro sistema político «sean una prioridad», proseguía el portavoz de los socialistas en las islas en un día tan señalado, quien apuntó a la vez en su intervención que «no todo vale en política», en referencia a los ataques al presidente del Gobierno y su familia.
El Partido Popular (PP) en Baleares lamentó este lunes que, «por desgracia», el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, «ni ha dimitido ni ha convocado elecciones» después de dar forma a lo que consideran desde la formación cinco días de «teatro para no cambiar nada». Así lo refirió el portavoz parlamentario de la formación, Sebastià Sagreras, quien admitió que «el tiempo ha dado la razón» a sus filas.
Y al hilo recordó que, cuando el presidente del Gobierno anunció una reflexión de cinco días para decidir si seguía al frente del Ejecutivo, después que un juzgado de Madrid abriera diligencias tras las denuncias de Manos Limpias sobre su esposa, Begoña Gómez, por presunto tráfico de influencias y corrupción, el PP ya dejó ver que lo de Sánchez era «teatro, una estrategia judicial y electoral, una maniobra de supervivencia política y una irresponsabilidad monumental como a la que tiene acostumbrado».
Sagreras, además, criticó que, si de Sánchez dependiera, en España «no habría ni oposición, ni jueces independientes ni medios libres. Sánchez solo se quiere a él, como se ha evidenciado después de cinco días de reflexión en los que se ha querido mostrar como víctima; mientras, además, su partido, el PSOE ha intentado polarizar y dividir a los ciudadanos», destacó. E incidió en que lo ocurrido en estos cinco días ha sido «una estrategia para intentar remontar la imagen de un Sánchez que estaba» y, en opinión de los 'populares', «sigue estando al pie de los caballos».
A la par, el presidente de El PI-Proposta per les Illes, Tolo Gili, manifestó su solidaridad con Sánchez «y con todos los políticos que se ven afectados por temas personales. Nunca se ha de utilizar la parte personal para atacar al adversario político», aunque reprochan al presidente del Gobierno que, en este caso, «ha sobreactuado».
«Si tenía pensado dimitir o reflexionar sobre el tema lo habría podido hacer en privado y no condicionar toda la agenda mediática y del país durante cinco días», añade Gili, quien destaca que este periodo de reflexión «deja muchas dudas y creemos que lo ha hecho para motivar a su militancia ante las próximas elecciones europeas y catalanas». Y critica que «ha hecho uso de un protagonismo excesivo».
En otro orden, el diputado de Sumar-Més en el Congreso, el mallorquín Vicenç Vidal, usó las redes sociales para dar su opinión con una reivindicación en paralelo. «El lawfare y la persecución política ha afectado a progresistas y soberanistas desde hace mucho. En Més per Mallorca no lo descubrimos ahora. La ley mordaza o la reforma del CGPJ están en la mesa. Afrontémoslo. En el Congreso y en el BOE, como dice na Àgueda Micó: No habrá muchas más oportunidades», escribía en la red social X (antes Twitter).
Desde Més per Mallorca han reclamado al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, cambios legislativos para «combatir el 'lawfare'» y ha responsabilizado al PSOE de colaborar en los casos que provocaron la dimisión de la exvicepresidenta de la Generalitat Valenciana, Mónica Oltra, y el cese del exdiputado de Unidas Podemos Alberto Rodríguez.
El portavoz de la formación ecosoberanista, Lluís Apesteguia, ha reaccionado de esta manera a la comparecencia ofrecida este lunes por el líder del Ejecutivo estatal, en la que ha anunciado su continuidad al frente de la Presidencia del Gobierno, pero ha criticado que se «esperaba más». En ese sentido, ha indicado que la continuidad de Sánchez era una «cuestión circunstancial», que a Més «le daba igual», porque, a su juicio, «de lo que se trata es de la democracia y no de las personas que ocupan ciertos cargos políticos y de defenderse todos juntos».
Del mismo modo, ha pedido una aclaración de si se mantendrán «leyes restrictivas de la libertad de la ciudadanía» como la Ley Mordaza, porque Apesteguia ha señalado que, «vergonzosamente», después de todos los años que lleva Sánchez en La Moncloa «sigue vigente»: «Y esto también es 'lawfare'». «El uso que el PSOE ha permitido que la derecha haga de las leyes también es 'lawfare' y, por tanto, si no hay cambios legislativos, no se hace lo que se predica y esto no va de quién gana el relato, esto va de si se protege la democracia con todos los instrumentos de los que somos capaces», ha reivindicado.
Al mismo tiempo, ha añadido que «da la bienvenida» al PSOE entre quienes «luchan contra la 'lawfare'» pero le exigen que «luchen contra él »porque si no habrá sido «mucho ruido para nada». El representante de Més ha iniciado su discurso con una mención a la afectación que haya podido tener esta situación para la salud mental de Sánchez, algo que desde su formación «entendieron» y «fueron respetuosos».
Así, ha señalado que el líder el Ejecutivo ha circunscrito su decisión a una «cuestión partidista» y ha recalcado que en Més «siempre han denunciado el uso del 'lawfare' por parte de la derecha y la extrema derecha», algo que ha incidido en que «viene muy de lejos». Apesteguia ha resaltado que todas las personas que «defienden la democracia se han visto obligadas a defender a cualquier partido o cargo atacado por el 'lawfare'», ya que es algo que «han sufrido desde hace años».
"¿DÓNDE ESTABA EL PSOE TODOS ESTOS AÑOS?"
Por estos motivos, ha preguntado retóricamente «dónde estaba el PSOE todos estos años» y ha aportado los ejemplos de Oltra y Rodríguez. En el caso de Oltra, ha apuntado que PSPV «empujó» a la dimisión a la política valenciana y sobre Rodríguez ha reprochado que la expresidenta del Congreso Meritxell Batet, «privó al diputado de su capacidad de representación ciudadana» al «ponerse del lado de los que ejercían el 'lawfare'»: «No todo ha empezado esta semana, ni todo ha empezado con Sánchez», ha alegado.
«El adanismo es un elemento de análisis equivocado, caiga quien caiga, y estoy contento de que el PSOE se sume a las personas que combaten el 'lawfare' por parte de la derecha, la extrema derecha, medios de comunicación y el poder judicial», ha manifestado.
Por último, la diputada de Unidas Podemos Cristina Gómez ha mostrado este lunes su apoyo a la decisión del presidente Pedro Sánchez de seguir al frente del Ejecutivo, pero ha pedido medidas para que el 'lawfare' no se convierta en «una herramienta de la ultraderecha para dar golpes de Estado blandos».
Así lo ha afirmado durante una rueda de prensa en el Parlament en la que ha valorado la actualidad informativa, afirmando que «no basta con que él aguante, porque no se trata de una persona, sino que el sistema necesita una gran transformación», ya que, según ha opinado, «el fondo de armario es el mismo de la dictadura».