El real decreto de becas y ayudas, aprobado este martes en Consejo de Ministros, presenta dos grandes novedades para el próximo curso. Y es que se aumentará los umbrales de renta máximos en un 5 % y se va a excluir por primera vez del cómputo de patrimonio las subvenciones al alquiler de vivienda habitual.
Además, por primera vez se va a rebajar la exigencia del porcentaje de discapacidad para el alumnado con necesidades específicas de apoyo educativo del actual 33% al 25%, equivalente a la discapacidad moderada. El objetivo principal del real decreto, propuesto por los ministerios de Educación y de Universidades, es garantizar la igualdad de oportunidades y que nadie abandone sus estudios por la falta de recursos económicos.
Por otra parte, a pesar de que aún no se han aprobado los Presupuestos Generales de Estado de este año, el Gobierno consolidará las mejoras introducidas en años anteriores, entre ellas el incremento de la beca de residencia (de 1.600 a 2.500 euros) y un subsidio de 400 euros para gastos generales de alumnos de necesidades educativas especiales.
¿Quién se puede acoger?
Del real decreto se derivan dos convocatorias: la general para Bachillerato, Formación Profesional, Enseñanzas de Idiomas, Artísticas, Deportivas y Universitarias -incluidas las de Máster-, y en segundo lugar la de ayudas para alumnado con especiales necesidades de apoyo educativo (discapacidad; trastorno grave de la comunicación y el lenguaje; trastorno de espectro autista y altas capacidades).
La primera se publicará el próximo mes de marzo y se prevé que haya cerca de 744.000 beneficiarios, mientras que la segunda se convocará en mayo y hay 249.000 personas que se podrían acoger.
¿Cuáles son las novedades introducidas este año?
Por un lado, el incremento de los umbrales de renta máximos en un 5%. Con ello se pretende detener la pérdida de beneficiarios, debida al incremento de las rentas salariales, particularmente las asociadas al salario mínimo interprofesional y al coste de la vida desde las últimas actualizaciones.
También se rebaja de la exigencia del porcentaje de discapacidad para alumnado con necesidades específicas del 33% al 25%. Además, se introduce la exclusión del cómputo de los rendimientos patrimoniales de las subvenciones al alquiler de la vivienda habitual. Se trata de una aclaración expresa que venía pidiendo el Defensor del Pueblo en los últimos años. Por último, se flexibilizarán los requisitos académicos de las víctimas de violencia sexual menores de edad.
Sobre las principales modalidades y cuantías de las becas, ayudas y subsidios para el próximo curso, hay que diferenciar entre enseñanzas universitarias y las no universitarias. En ambas modalidades, se establece una cuantía fija ligada a la renta y a la residencia de 1700 euros y de 2500 euros. También, se iguala la cuantía de rendimiento académico (entre 50 y 125 euros a partir de nota media de 8 puntos) y la variable, con un importe mínimo de 60 euros. Por otra parte, la beca básica será de 300 euros (En el caso de cursar ciclos formativos de Grado Básico serán 350 euros) en la no universitaria, mientras que la beca de matrícula en la enseñanza universitaria comprenderá el precio público oficial de los servicios académicos universitarios correspondiente a los créditos en que se haya matriculado el estudiante por primera vez en el curso 2024-2025.
Requisitos académicos para obtener beca
En niveles no universitarios, de grado o de máster, se establece que el alumno deberá obtener una calificación de 5 puntos (4º ESO en el caso de curso no universitario, prueba de acceso a la Universidad y estudios previos al Máster, en enseñanza universitaria).
Por otra parte, en los segundos cursos o posteriores, el alumno deberá superar un determinado número de asignaturas y de créditos para optar a las becas. Éste será del 85 % de materias en el caso de enseñanza no universitaria, mientras que en las Universidades, el porcentaje varía dependiendo de la modalidad de carrera que ha elegido el alumno (entre el 65 % y el 90% de los créditos matriculados).