El Govern ha asegurado que el objetivo de las negociaciones de los grupos parlamentarios para evaluar la legalización de construcciones en zonas inundables es «minimizar riesgos» pero «no prohibir siempre».
De esta manera se ha pronunciado el portavoz y vicepresidente del Govern, Antoni Costa, durante su comparecencia en la Comisión de Asuntos Institucionales y Generales del Parlament, para dar cuenta de la Ley Omnibus que se podría aprobar en las próximas sesiones.
En su turno de réplica, ha criticado que la oposición de izquierdas asocie «minimizar riesgos a prohibición» y ha reprochado que el anterior Ejecutivo permitiera construir viviendas en explotaciones agrícolas o equipamientos de servicios públicos en zonas inundables.
Asimismo, ha censurado que se prohibiera construir en «áreas de riesgo» cuando, a su juicio, «no tienen aval técnico» y son una «brocha gorda».
Anteriormente, Costa ha alegado que al Govern «no le corresponde» entrar en las negociaciones que puedan llevar a cabo los grupos parlamentarios para alcanzar un acuerdo sobre la legalización de viviendas en zonas inundables.
Costa ha indicado que el Govern está «de acuerdo» en el espacio de debate que se ha abierto sobre este tema, a raíz de las consecuencias de la DANA que ha afectado a la Comunitat Valenciana, Castilla-La Mancha y Andalucía.
«Es una ley que emana del decreto ley de Simplificación Administrativa pero hay algunas cuestiones abiertas que los grupos están negociando y no le corresponde al Ejecutivo dar cuenta de las enmiendas que se incorporan o no al texto definitivo», ha señalado.