El Gobierno estudia vías para anular la ley que permitirá a los menores volver a ver una corrida de toros en Baleares. La ministra de Juventud y de Infancia, Sara Rego, de Sumar, se ha mostrado este miércoles en desacuerdo con esta autorización y considera que lleva «a las tradiciones más crueles», algo que, dice, no le parece «lo más sensato». En una entrevista en RAC1, la ministra ha añadido que el Gobierno estudia si plantea alguna cuestión para limitarlo, si bien no ha concretado qué medidas se están barajando.
Rego ha criticado que Vox se empeña a llevar a España «de nuevo al siglo pasado», mientras que ha señalado al PP por estar dispuesto a pasar por alto cuestiones «que pueden ser de vulneración de derechos de la infancia» con tal de mantenerse en el poder. La intención de la ministra parece complicada porque esta cuestión ya se planteó cuando se negociaba la ley estatal de bienestar animal, promovida en la pasada legislatura por Podemos. No se llegó a un acuerdo por las resistencias del PSOE.
De hecho, el Gobierno central ya recurrió la ley de ‘toros a la balear' que prohibía matar al animal y el Tribunal Constitucional anuló la mayor parte del articulado pero no la posibilidad de que la comunidad decida la edad de entrada a los espectáculos taurinos. La mayoría de las comunidades autónomas donde se celebran festejos taurinos permiten la entrada de menores. Los menores de 16 años tenían prohibida la entrada desde el año 1992 y esta edad se elevó hasta los 18 años en una reforma de la ley que se aprobó en el año 2017.
En relación con la modificación de la ley que aprobarán PP y Vox cuando acabe su tramitación, la diputada de Podemos, Cristina Gómez ha remitido un escrito a la defensora del menor de Baleares donde le conmina a que emita un informe sobre este cambio normativo y le pide que actúe de inmediato «para proteger los derechos de la infancia». La diputada considera que esta reforma legal «supone una vulneración del derecho de los menores a una infancia libre de violencias», por lo que contraviene las recomendaciones de los organismos internacionales y la propia Constitución.
«Las corridas de toros son espectáculos donde se está aplaudiendo la tortura y la muerte de los animales y los menores no tienen nada que hacer allí», asegura Gómez. «Los toros tienen los mismos derechos que el resto de animales», añade.