La Palma International Boat Show llega a su cuarenta edición con más solidez que nunca y un récord de participación. las cifras hablan por sí solas: hay 295 expositores, un 10 % más que el año anterior y se muestras hasta 600 embarcaciones, 260 de ellas, en el mar. El sector muestra músculo en Baleares donde le representan unas 800 empresas capaces de facturar al año unos 1.100 millones, tal y como explicó durante su presentación el conseller de Indústrica, Alejandor Sáenz de Sampedro.
Este jueves, durante la inauguración de la feria que sitúa a Mallorca por unos días (podrá visitarse hasta el 28 de abril) en el epicentro del sector, la presidenta del Govern, Marga Prohens, ha destacado que es una industria tradicional de las Islas «estratégica para nuestra economía, el cual genera desestacionalización turística y trabajo de calidad». En el acto, por cierto, no se han admitido preguntas y se han denegado comentarios sobre la actualidad política balear, que pasa por el cese del director general de Transparencia, Jaume Porsell; o de la nacional, relacionada con la carta hecha pública por el presidente Pedro Sánchez.
La novedad de la Palma International Boat Show este año, como ya se avanzó en Fitur, es que la organización ha iniciado la certificación como evento sostenible, comprometiéndose a minimizar la huella de carbono que se medirá por primera vez para después planear su reducción. Además, «hemos ampliado el plazo de solicitudes de las ayudas para descarbonizar el sector náutico de Baleares», ha incidido Prohens.
Por otra parte, la presidenta del Govern ha recordado también que la feria medirá su impacto económico, no sólo en los días en que se mantiene abierto el recinto, sino también en las jornadas previas, gracias a la colaboración con la Dirección General de Economía y Estadística de la Conselleria de Economía. Por último, ha recordado la Formación Profesional existente vinculada a este sector en los centros s'Embat y Centro del Mar.