La Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil tomó este miércoles declaración como testigo al exdirector del IB-Salut, Manuel Palomino, en relación al contrato de 3,7 millones de euros en mascarillas, en la trama del denominado 'caso Koldo'.
Los agentes son especialistas de Madrid, que se desplazan por las comunidades autónomas donde hay citados testigos en relación a esta trama. Luego, traspasan todo el material a sus mandos de la Unidad Central, en la capital. El contenido de la declaración de Palomino no ha trascendido.
Sin embargo, las fuentes consultadas han indicado que la intención de los investigadores era preguntarle por un informe del IB-Salut que sostenía que la reclamación a la empresa investigada por la venta de mascarillas se hizo antes de las elecciones autonómicas. En concreto, el documento está fechado del 20 de marzo de 2023 y lleva la firma de Palomino. Este dato contradecía la información proporcionada por el portavoz del Partido Popular, Sebastià Sagreras, que asegura que la expresidenta Francina Armengol no reclamó el sobrecoste de 2,6 millones de euros que se pagó por las mascarillas hasta que supo que no seguiría en el Govern.
El informe en el que se reclama el dinero está fechado el 6 de julio de 2023, el mismo día en que Marga Prohens fue elegida presidenta de Baleares. Sagreras sostuvo que este sobrecoste se conoció tres años antes y, durante ese tiempo, Armengol no hizo nada para exigir la devolución del dinero estafado.