La presidenta del PP balear, Marga Prohens, reajusta la cúpula del partido y da aún más poder a quien será el hombre fuerte indiscutible de la formación: Sebastià Sagreras. El portavoz del partido en el Parlament será el nuevo coordinador general y su puesto de vicesecretario de Organización queda en manos de Pedro Álvarez, líder del partido en Sineu. Otro cargo municipal, el actual alcalde de Ses Salines, Joan Rodríguez, será el nuevo portavoz del PP. Sustituye en este puesto al ex alcalde de Llucmajor, Eric Jareño, que ya no ocupa cargos orgánicos en el partido.
Marga Prohens realiza esta remodelación para reforzar la estructura del PP. Hay cambios en en el primer nivel, con los nombres de Sagreras y Rodríguez, pero mantiene a Sandra Fernández como secretaria general que, por lo tanto, sigue como mano derecha de la presidenta en el partido. Donde sí hay cambios es en el segundo nivel de mando del PP. El exalcalde de Andratx Jaume Porsell será el vicesecretario de coordinación institucional y Marga Durán será la vicesecretaria de organización sectorial, dos cargos que cambian de nombre con respecto al organigrama actual.
«Queremos reforzar la estructura del partido para seguir a pie de calle conociendo las necesidades de los ciudadanos de Balears», ha señalado la secretaria general de la formación a la salida de la Junta Regional en la que se comunicaron los cambios. «Mantener vivo y activo el partido es fundamental», ha añadido
Entre los cambios organizativos que se han aprobado figura una reordenación de las comisiones internas de trabajo para adaptarlas al organigrama actual del Govern y poder hacer una actuación más coordinada. Varios diputados encabezarán estas comisiones de trabajo para evitar disfunciones entre las actuaciones parlamentarias y las internas del PP. Entre los diputados que se ocuparán de esta coordinación interna se encuentran Lourdes Cardona, Cristina Gil, Mauricio Rovira o Margalida Pocoví, a quienes se les han asignado áreas específicas.
La remodelación interna llega en un momento de calma para el partido, tras las tensiones vividas con sus socios de Vox, primero con la aprobación de los Presupuestos y después con el intento de descabalgar a Gabriel Le Senne como presidente del Parlament. El PP destaca que el problema político ya no está en sus filas, sino que lo tiene el PSIB.