El Registro Civil de Palma ha denegado por el momento dos peticiones de cambio de sexo legal porque apreció que suponían un fraude legal. Ambas resoluciones fueron acordadas en agosto por la magistrada a cargo del registro y responden a una dinámica similar. Se trataba de hombres de mediana edad que, durante la entrevista prevista por la ley en el propio registro civil no mostraban ningún tipo de señal que indicara que se sentían de género femenino, ni externa ni interna. Tampoco les acompañaba nadie que les tratara como mujer. La impresión que tienen ambos autos es que ese cambio de sexo legal solo pretendía figurar como mujeres en legalmente y aprovecharse de forma fraudulenta de la normativa, que entró en vigor el pasado mes de febrero.
Según fuentes del registro de Palma se tratan de casos poco frecuentes y son mayoritarias las personas que emplean el mecanismo de forma legal y justificada. La denominada ‘Ley Trans' permite el cambio en el registro sin exigir requisitos. No obstante, el Ministerio de Justicia ha dado instrucciones para que se combatan posibles fraudes, algo que sí permite la normativa que regula los registros civiles y que marca que estos deben reflejar situaciones reales. Igual que a la hora de inscribir un nacimiento, una defunción o un matrimonio. En el caso de los cambios de sexo se prevé una petición en la que se puede aportar documentación y a la que sigue una entrevista con un responsable del registro. Tras esa primera petición, quien lo demanda debe ratificarlo en un plazo de cuatro meses y resolverse en uno más.
En el registro han detectado varios casos de hombres que se han presentado al primer trámite pero de los que luego no ha vuelto a haber noticias, lo que sugiere una intención de tratar de burlarse de la norma.
El apunte
Oficinas administrativas sin juez al mando desde hace un mes
El control judicial de los registros civiles es historia desde hace un mes. Una modificación legal convierte a estas oficinas en puramente administrativas. Al frente de las mismas, al menos por ahora en Palma es así, estará un letrado de la Administración de Justicia que será el encargado de verificar todos los trámites, entre ellos las inscripciones de cambios de sexo, matrimonios o nacionalidad. Sobre los primeros hay sospechas de otros posibles intentos de fraude en Palma que tendrán que ser resueltos por el letrado. Ante este cambio ya se trasladaron las oficinas del registro desde los juzgados de sa Gerreria a una dependencia junto al Mercat de Llevant.