El Consell de Mallorca ha confirmado este miércoles que ha puesto en manos de la Fiscalía la investigación de tres posibles nuevos casos de explotación sexual de menores tutelados por el Instituto Mallorquín de Asuntos Sociales (IMAS) durante los últimos tres meses tras las sospechas presentadas por trabajadores de los centros residenciales de menores. En este sentido, el conseller ejecutivo de Bienestar Social y presidente del IMAS, Guillermo Sánchez, no ha dado mucha más información para dejar actuar a las autoridades y proteger a los menores, pero ha recalcado su intención de ser «muy transparentes» con el resto de partidos políticos y con la sociedad mallorquina sobre estas lacra.
Los protocolos que se pusieron en marcha en el IMAS la pasada legislatura para evitar que se produjeran nuevos casos de explotación de menores en la Isla, cuando se descubrió que 16 menores tuteladas del IMAS eran explotadas sexualmente, parece que están surtiendo efecto. En este sentido, se crearon referentes en victimización sexual dentro del equipo educativo, en cada centro de acogimiento, que se han convertido en los 'ojos del centro' y estudian si hay indicadores de riesgo en la forma de actuar de los menores tutelados. Ahora hay un registro de fugas, se notifica si hay un cambio de imagen, si el menor tutelado aparece con ropa nueva u objetos de valor de procedencia desconocida, si cambia de amistades, consume sustancias o deja de ir a clase. Todos estos indicadores pueden ser los que hayan llevado a los trabajadores de los centros de menores a denunciar los tres casos sospechosos de explotación que ahora se están investigando.
Además, se sigue trabajando en mejorar la coordinación entre instituciones, se ofrecen charlas afectivo-sexuales, formación específica para educadores, protocolos de vigilancia adaptados a los nuevos tiempos y a las nuevas formas de relacionarse de los jóvenes, así como la puesta en marcha de un centro especializado en Mallorca con ocho plazas para menores rescatadas.
Auditoría
El Consell de Mallorca también ha anunciado que ha puesto en marcha una auditoría para mejorar su servicio de protección de menores, garantizar su correcta tutela y «conocer con exactitud qué falló» la pasada legislatura. Por el momento, no se ha adjudicado a ninguna empresa la misión, ni se ha podido dar un plazo de inicio o finalización de la investigación, así como el coste de la auditoría. Eso sí, han recalcado desde el Consell que la auditoría se va a centrar en el funcionamiento actual del servicio «para mirar hacia delante».
Como ha recalcado el presidente de la institución insular, Llorenç Galmés, «el propósito de este análisis es mejorar en la protección de los menores por parte del IMAS, que tiene bajo su tutela a unos 1.000 chicos y chicas, de los que 395 viven en centros del IMAS gestionados de manera directa o concertada. En este sentido, Galmés ha acusado al anterior gobierno de la institución y su presidenta, Catalina Cladera, de ocultar estos 16 casos que están siendo investigados por la Justicia y que convirtieron a Mallorca en «la vergüenza de Europa».
También ha asegurado que «una de nuestras prioridades es construir un centro de primera acogida de menores de 13 a 17 años de gestión propia, para el que, en estos momentos, se está buscando un solar donde ubicarlo». Además de este centro, existen otros dos expedientes abiertos para el aumento de las plazas disponibles actualmente. En primer lugar, se procederá a la concertación de 32 nuevas plazas con las entidades colaboradoras; y en segundo lugar, se está en proceso de adquisición de dos inmuebles con capacidad de 8 plazas cada uno vinculados a fondos europeos que, de esta forma, se tratarán de no perder.