El coordinador jefe de la Direcció Insular d'Infraestructures i Mobilitat del Consell de Mallorca emitió una orden el 3 de junio del año pasado para que los trabajadores del Servei d'Explotació i Conservació empezaran a habilitar el carril bus-VAO en la autopista de Llevant. Ahora, tras el cambio de gobierno en la institución insular, el coordinador (el único que hay en materia de carreteras) firma el informe que tacha de ilegal el carril pese a que el Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana y la Dirección General de Tráfico lo hayan desmentido. De esta manera, el mismo técnico que hace un año firmó a favor del proyecto, ahora defiende que infringe la NORMA 3.1-IC de la Instrucción de Carreteras del Ministerio. No consta que avisara de haber detectado ningún incumplimiento.
El documento, que señala otros inconvenientes producidos por la puesta en marcha del carril, como un mayor número de atascos y accidentes, pretende servir de argumento para el PP, que es el que lo ha encomendado a los técnicos insulares, para convencer a la DGT de que les permita suprimirlo. El organismo estatal es el que tiene la última palabra sobre si se quita o no el carril que los ‘populares' prometieron eliminar en campaña electoral.
Fuentes del Departament de Territori, Mobilitat i Infraestructures, encabezado por Fernando Rubio, explicaron ayer a este diario que el coordinador no tuvo otra opción que firmar la puesta en marcha del bus-VAO porque la DGT así lo pidió tras valorar que era viable su instalación. El anterior equipo de gobierno se encargó de justificar que fuera factible para que el organismo estatal lo aprobara y acabara publicado en el Boletín Oficial del Estado (BOE). Las mismas fuentes del departamento consultadas reiteraron que el coordinador era el único que podía dar la orden para que las concesionarias habilitaran la señalización del carril y que entonces no se le pidió opinión sobre qué le parecía el bus-VAO.
Normativa especial
El informe del Consell firmado por el coordinador insiste en el apartado de la instrucción en el que se dice que se impide habilitar carriles bus-VAO en autopistas, autovías y carreteras convencionales, sin precisar que esto se refiere a vehículos destinados únicamente al transporte colectivo, como los buses. La instrucción del Ministerio, sin embargo, dedica un apartado concreto para tratar los carriles que, además de transporte colectivo, también permiten circular a Vehículos de Alta Ocupación, aquellos en los que pueden viajar dos o más personas, como es el caso de los carriles Bus-VAO. «Se establecerán generalmente en tramos urbanos y periurbanos utilizando una plataforma situada en la mediana de una autopista o más frecuentemente de una autovía o un carril específico para dicho uso. Usualmente, se utilizará el tipo reversible», indica la instrucción ministerial. Sobre esto, el Gobierno respondió tajante: «Si se lee con detenimiento el artículo referido a los bus-VAO en absoluto se deduce lo que dice el Consell».
El carril de la autopista de Palma no se ha construido ganando espacio a la mediana, por el contrario, se optó por usar señalización vertical y pintura en el asfalto para indicar el trazado de dicho carril. Esta segunda opción está recogida en la descripción cuando dice que se usará «un carril específico» y «reversible». El informe del Consell lo niega a pesar de las respuestas del ministerio y la DGT y defiende que esta tipología de carriles, únicamente señalizados con marcas viales, no están permitidos en autopistas.
El informe técnico del Consell establece que la mitad de los buses de la EMT de Palma no los usan por las dificultades que tienen a la hora de incorporarse a las diferentes direcciones, especialmente en la vía de cintura. También asegura, con datos propios, que de enero a julio se pasó de 16 accidentes en el 2022 a 28 este año en el tramo que ocupa el bus-VAO y que ha provocado un aumento del 20 % de las colas en los otros dos carriles.