La llegada de las fiestas de Semana Santa va acompañado, año tras año, de la llegada de turistas y del incremento de vuelos en el aeropuerto de Palma. A pesar de que cada año se produce este incremento en estas fechas tan señaladas, los controles de seguridad de Son Sant Joan han sufrido aglomeraciones durante la mañana de este miércoles.
Según han informado a Ultima Hora, las colas se han producido por la falta de controles de seguridad. Los pasajeros se han ido acumulando hasta formar una larga fila, que ha llegado ocupar buena parte del pasillo, fuera ya de la zona habilitada para los controles. Pese a esta situación de colapso, se ha optado por mantener los seis puntos y no abrir más de un total de ocho.
Un mallorquín, que este miércoles parte de viaje a Madrid, ha sido uno de los pasajeros afectados por las aglomeraciones. Nada más llegar al control de la parte izquierda, ha empezado a hacer cola en los accesos a la zona, donde se requiere la tarjeta de embarque para entrar. «Hay muchísima gente, la mayoría, turistas. Los trabajadores se están dando mucha prisa», comentaba al terminar de pasar el control, tras 15 minutos de espera. Las aglomeraciones se han dado tanto en los dos controles generales como en el acceso VIP. Según ha informado Aena, esta situación se ha producido al coincidir dos vuelos que salían al mismo tiempo y han corroborado que las esperas no han sido de más de 15 minutos. «Ha sido una situación momentánea».
El aeropuerto, saturado
Desde que ha empezado el mes de abril, las noticias de saturación en el aeropuerto no han cesado. Este 1 de abril, los taxistas ya denunciaron que el servicio de taxis en el aeropuerto de Palma llevaba «un par de semanas con síntomas de colapso». A ello se sumaron los colapsos diarios en los carriles de acceso a la terminal de Llegadas, donde decenas de vehículos han acostumbrado a aparcar, invadiendo la autopista, para evitar pagar el parking de Son Sant Joan.
AENA trató de disuadir a los conductores de estacionar en de acceso a Llegadas implementando la semana pasada una barrera sobre uno de los carriles. Ello no ha evitado que la estampa siga repitiéndose con frecuencia: los vehículos estacionan antes de la barrera, directamente en la carretera.