Ningún ayuntamiento de Baleares ha aprobado las Zonas de Bajas Emisiones (ZBE), previstas en la Ley 7/2021 de cambio climático y transición energética, en las que se limitará el acceso a los vehículos más emisores y contaminantes. El objetivo es mejorar la calidad del aire y mitigar las emisiones de gases de efecto invernadero. Esta medida afecta a los municipios de más de 50.000 habitantes y a los de más de 20.000 habitantes que superen los valores límite de los contaminantes regulados en Real Decreto 102/2011. El resto de localidades pueden hacerlo de forma voluntaria. Hasta el momento han aprobado las ZBE muy pocos consistorios, motivo el que la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) ha pedido al Ministerio de Transición Ecológica que amplíe el plazo; el departamento liderado por Teresa Ribera aún no ha respondido.
El regidor de Mobilitat del Ajuntament de Palma, Xisco Dalmau, ha asegurado que el Consistorio palmesano está cumpliendo la normativa, ya que lo obligatorio es tener planes de movilidad sostenible en los que se incluya la creación de las ZBE antes de 2023. En este sentido, ha recordado que la capital balear aprobó el Plan de Movilidad Urbana Sostenible (PMUS) el pasado mes de septiembre. Este documento recoge las ZBE, que se implantarán en varias fases. La primera de ellas afecta de Avenidas hacia dentro e implica que cuando entre en vigor sólo podrán circular por esta zona los vehículos autorizados.
Dalmau ha estimado que las ZBE se aprobarán este año, aunque ya durante la próxima legislatura, puesto que intentarán consensuarlas con los vecinos y la oposición. Sin embargo, no estarán en vigor este ejercicio. Además, se darán periodos de carencia, porque no se pretende que los propietarios tengan que vender los vehículos; la finalidad es que el parque móvil de Ciutat se vaya renovando de forma natural.
Calvià la implantará en Magaluf
Desde el Ajuntament de Calvià han explicado que aunque superan los 50.000 habitantes, «tiene unas características especiales». En este sentido, han precisado que cuenta con «muchos núcleos de población, es muy amplio y muy disperso, y con un diseño muy lineal en las zonas más pobladas (la costa). De hecho, la zona más poblada, que es Santa Ponça, tiene poco más de 13.000 habitantes. Es decir, no es un municipio compacto, no tiene una gran densidad de población y de vehículos en un mismo espacio».
Aunque aún no han aprobado la ZBE, está previsto que se implante en Magaluf; la intención es poder aprobarla a lo largo de 2023, aunque ya será en el próximo mandato. Fuentes municipales han manifestado que el Plan de Movilidad Urbana Sostenible e Inteligente de Calvià (PMUSI) se encuentra en exposición pública y ya se ha empezado a trabajar en la ordenanza, en la que se aprobará la ZBE. «Hace dos años que se empezó a elaborar el PMUSI, que ha tenido diferentes procesos participativos, con sectores afectados, diferentes informes que van implícitos en la elaboración, exposición pública y presentación de alegaciones, etc», han concluido.
Ibiza también está en proceso
El Ajuntament de Ibiza también se encuentra inmerso en la aprobación de la CBS. En concreto, abarcará una superficie de 167 hectáreas, un perímetro de 6,45 kilómetros y tendrá nueve puntos de acceso. Los vehículos de transporte de mercancías, sanitarios o de emergencias no sufrirán restricciones.
El apunte
El Govern habilita ayudas para los ayuntamientos
La Conselleria de Transició Energètica, Sectors Productius i Memòria Democràtica ha aprobado una línea de subvenciones con la finalidad de ayudar a los ayuntamientos de Baleares a aprobar las Zonas de Bajas Emisiones (ZBE).
El importa máximo de esta convocatoria para el año 2023 es de 8,6 millones de euros. Todos los consistorios interesados, tanto los que están obligados a probarla las ZBE como los que no, las podrán solicitar entre el 23 de enero y el 23 de junio de 2023.