Mallorca no quiere turistas ingleses en verano. Así de tajante publica este miércoles el periódico 'The Sun' una entrevista con la directora insular de Turismo del Consell de Mallorca, Lucía Escribano, en el marco de la World Travel Market, la feria turística que se celebra estos días en la capital británica. Escribano abordó el decrecimiento turístico, el turismo de excesos y la desestacionalización. Las declaraciones han causado polémica en uno de los principales países emisores de turismo para la Isla.
«No estamos interesados en promocionar la Isla en verano», explicó Escribano al periódico inglés, en relación a la estrategia turística del Consell sobre el cambio del modelo turístico. El objetivo, por contra, sería fomentar el turismo en temporada baja y centrado en actividades culturales o deportivas. «Queremos enfocarnos más en actividades no estacionales en lugar de aquellas relacionadas con el sol y la playa». En esta misma línea, hace dos días se conocía que el Govern reserva una partida de 6,4 millones en sus Presupuestos del año que viene para hacer promoción de Baleares, pero esta se destinará a coordinar acciones de promoción «en temporada baja y medio», desarrollar estrategias de comunicación en los mercados emisores, asistencia a acontecimientos y ferias estratégicas o campañas de comunicación para promover el turismo en las Islas.
Decrecimiento turístico
«Estamos limitando el número de camas en la Isla. Queremos calidad, no cantidad. En este momento tenemos 300.000 camas de hoteles y queremos menos, no más», manifestó la directora insular de Turismo del Consell. Esta limitación en el número de camas disponibles iría en consonancia con el objetivo de reducir el flujo de turismo -tras las cada vez mayores críticas por una masificación turística en Mallorca- y supliendo esa pérdida con la búsqueda de turistas de alto poder adquisitivo, procedentes de Alemania y de países escandinavos: «Estamos interesados en tener menos personas de Reino Unido y más de otras partes de Europa, donde hay una mejor conectividad aérea». «No estamos interesados en tener turistas con presupuesto de Reino Unido, nos da igual si eligen otros destinos como Grecia o Turquía». Sin embargo, y según indica el mismo medio de comunicación que recoge la entrevista, esta postura se contrapondría con los numerosos negocios que dependen actualmente de este tipo de turismo en zonas como Calvià, Llucmajor o Palma.