El final del torrente que desemboca en la playa de Camp de Mar (Andratx) y buena parte de la orilla ha amanecido repleto de pequeñas medusas azules. Su aparición en masa ha sorprendido a los turistas y visitantes que estos días soleados comienzan a llenar la zona. Muchos se congregaban este martes por la mañana en la parte del paseo, curiosos y atraídos por la estampa y el olor que desprenden estos invertebrados.
Estas medusas en particular no son más nocivas que eso, de hecho esta especie es inofensiva para las personas. La barqueta de Sant Pere (Velella velella), o simplemente 'barquita' como algunas personas del lugar las llaman, han llegado al litoral andritxol pocos días después de un temporal marítimo, y de que en las Pitiusas se realizaran avistamientos similares en fechas anteriores.
Si hace unas jornadas la noticia estuvo en Ibiza, donde la arena de alguna playa amaneció teñida de azul, poco a poco se están registrando avistamientos de medusas en las costas de Mallorca. En las aguas de Calvià, otro importante epicentro turístico de la Isla, todavía no se han reportado según aseguran fuentes municipales, pero viendo lo que sucede en las áreas colindantes no es descartable que acabe por darse también. Asimismo, los hermanos Pou, escaladores que recorren habitualmente la geografía mallorquina, ya han tenido encuentros con estos habitantes de las calas a cuyas paredes acuden los deportistas de renombre internacional para realizar su práctica.
En la capital balear los vecinos de las zonas de Can Pastilla, Ciutat Jardí y el Coll d'en Rebassa han comunicado la presencia de medusas en la arena. ¿El episodio de Cala Gració (Ibiza) y los registrados en Mallorca en las últimas horas están conectados? Sobre la avalancha de estos inofensivos grumers que arriban a nuestras playas en esta época del año sabe mucho Antoni M. Grau, cap de Servei de Recursos Marins de la Direcció General de Medi Rural i Marí del Govern.
Grau asegura que este tipo de medusas es muy típico de la primavera e incluso del invierno en nuestras Islas. Además, «su aparición es cíclica y no tiene nada que ver con el cambio climático. Lo que estamos viendo es absolutamente normal y este tipo de medusas son inofensivas porque no pican. Es cierto que tal vez las hayamos visto aparecer algunas semanas más tarde que en otras temporadas», un hecho que el especialista explica en que «tal vez el agua esté un poco más fría de lo que es habitual en un mes de abril, por el tiempo meteorológico que hemos tenido el pasado mes de marzo».
El apunte
¿Y la carabela portuguesa?
Con el mes de mayo a la vuelta de la esquina y la temperatura del mar en aumento empieza a ser más probable que algún bañista o marinero se tope con una carabela portuguesa, que a pesar de no ser una medusa como tal visualmente recuerda mucho a las mismas. Esta especie es conocida por su potente picadura, capaz de matar a un niño a una persona inmunodeprimida.
«Por ahora no tenemos noticias de la llegada de las carabelas portuguesas a las Islas. Sería algo muy complicado porque hasta ahora apenas hemos tenido episodios de viento de Ponent, que facilita la entrada de las carabelas portuguesas en el Mediterráneo por el Estrecho de Gibraltar» indica Grau.