La cuarentena mantiene a una persona que pudo haber estado expuesta al virus alejada de otras personas. El aislamiento mantiene a quienes fueron infectados por el virus lejos de las demás personas.
Esta es la lección que debían haber aprendido los jueces que tomaron la decisión de enviar los jóvenes que habían dado negativo a su casa. Y si quieren más información añado:
¿Qué significa hacer cuarentena?
Hacer cuarentena significa que alguien que podría haberse expuesto al virus pero que no presenta síntomas, y no ha recibido la vacuna, se tiene que quedar en casa. Esto se debe a que podría estar infectado y podría contagiar el virus a otras personas, aunque se sienta bien. Después de haber entrado en contacto con una persona que tiene COVID-19 (o cuya prueba del COVID-19 dio positiva), una persona debe hacer cuarentena si, entre otras cosas:
• Estuvo a menos de 2 metros de la persona infectada durante un mínimo de 15 minutos, en un período de 24 horas.
• Compartió vajilla, vasos o cubiertos con una persona infectada.
• Ha tocado, besado o abrazado a una persona infectada.
Una persona también puede tener que hacer cuarentena si así lo requiere el departamento de salud Pública de la CCAA después de que haya viajado a una zona donde había una alta incidencia de las infecciones por COVID-19.
Las personas que no necesitan hacer cuarentena después de un contacto cercano con alguien infectado incluyen:
• Aquellos que están completamente vacunados.
• Aquellos que hayan tenido una infección por COVID-19 en los últimos 3 meses, se hayan recuperado y ya no tengan síntomas.
¿Qué significa el aislamiento?
El aislamiento es cuando una persona que se ha infectado con el virus y es contagiosa debe quedarse en su casa. Esto ayuda a prevenir el contagio del virus a otras personas.
Una persona se debe aislar cuando:
• Presenta síntomas de una infección por COVID-19.
• Ha dado positivo en la prueba para detectar el COVID-19 (tenga o no tenga síntomas).
Es muy sintomático que tras dieciséis meses de pandemia esta jueza no sepa diferenciar entre cuarentena (de los contactos estrechos) y aislamiento (de los infectados).
La conclusión de la jueza a la que llegó es que aunque lo que dicen los salubristas y epidemiólogos es que si has tenido contacto estrecho con un positivo debes guardar cuarentena diez días, ella nos dice que si ese contacto ha sido en un viaje de estudios que hayas hecho a otra comunidad autónoma para irte de conciertos en grupo y sin mascarilla, emborracharte, hacer botellones y desmadrarte, puedes dejar de hacer la cuarentena. Ni se mantiene en cuarentena a los infectados ni se pone en aislamiento a los contactos estrechos. Increíble.
Y es que el hecho de que la Jueza vea desproporcionada la medida de control de confinar los contactos estrechos, esta decisión puede suponer cientos de contagios más.
Ya decíamos hace semanas que no podía ser que el Gobierno terminara el estado de alarma y fueran los tribunales los que tuvieran que decidir qué medidas aprueban o suspenden sobre lo que pueden poner en marcha las CCAA (muchas veces con contradicciones entre tribunales y a veces en el mismo tribunal). En este caso han ido un poco más lejos, y cómo no saben ni se asesoran con quienes pueden ayudarles, se equivocan en perjuicio de la comunidad.
Necesitamos jueces que no hagan de epidemiólogos y salubristas. Y que los epidemiólogos y salubristas expliquen mejor a los afectados por que tienen que estar en aislamiento o cuarentena en este caso. Todos ganaríamos.