Un auto confirma la aplicación de una reducción a la mitad en el precio que paga la empresa que explota un hotel de Calvià por culpa de la pandemia. La decisión proviene de la Audiencia Provincial de Valencia y es una de las primeras resoluciones en las que se aplica la cláusula rebus sic stantibus, que se ha convertido en una de las esperanzas de los negocios para poder reducir costes durante las restricciones. Un juzgado de Primera Instancia ya había valorado en junio del año pasado la necesidad de aplicar esa reducción como una medida cautelar y había aplazado el pago del 50% de la renta mínima mensual desde ese mes hasta que se dicte la sentencia definitiva.
Ahora, la Audiencia Provincial confirma esa rebaja porque considera que existen unas circunstancias extraordinarias y que la medida aplicada es proporcionada. Para el tribunal, se trata de una situación «distinta» al de la reducción en la facturación de la empresa por una crisis económica «u otros eventos más o menos previsibles dentro del ámbito de los riesgos normales del contrato».
También se apoya la duración de la medida, que se prolonga mientras existan restricciones que impidan al hotel operar con normalidad «dado el contexto actual y la evolución de la pandemia en los últimos meses». Además, valora como algo «notorio» el «demoledor efecto en el sector» por lo que rechaza la alegación del dueño de que el arrendatario podía haber tomado medidas para paliar este impacto. «Resulta difícil imaginar cuáles podrían haber sido dichas medidas, sin que pueda exigirse a la entidad deudora una prestación desemedida y desorbitante».
El hotel está en Son Caliú (Calvià) y está explotado por la empresa Iberstreet S.L., que a su vez lo tiene arrendado a Atom Hoteles Iberia. El contrato para la explotación implicaba una renta variable según la facturación con un mínimo de un millón de euros. El hotel estuvo cerrado durante tres meses e intentó abrir durante el verano pero con un resultado pírrico. La empresa arrendadora explota el establecimiento durante nueve años. Antes de obtener esa reducción la empresa ha tenido que aportar una fianza de medio millón de euros.