Mallorca casi duplica la incidencia acumulada de la media española. El portavoz del comité autonómico de enfermedades infecciosas, Javier Arranz, ha informado este martes que la incidencia acumulada de COVID-19 de la Isla a 14 días es de 348 casos por cada 100.000 habitantes, mientras que la media nacional es de 198.
La mala situación epidemiológica de Mallorca ha motivado que Baleares sea por primera vez la comunidad autónoma con la mayor incidencia acumulada, concretamente del 280,13 %. El especialista en Medicina Preventiva y Salud Pública, Joan Carles March, ha precisado que el pasado mes de agosto las Islas también estuvieron en la cabeza, pero «eran unas cifras más bajas». Concretamente de 137,46 casos por cada 100.000 habitantes a día 13 de agosto cuando sólo el País Vasco superaba a Baleares; el 15 de agosto sólo Cataluña superaba a las Islas.
Cabe destacar que hasta hace poco, Baleares era la segunda comunidad autónoma de España con menor incidencia acumulada. No obstante, algunas comunidades superaban los 1.000 casos de coronavirus por cada 100.000 habitantes, lo que obligó a adoptar importantes medidas restrictivas.
¿Por qué Baleares ha empeorado tanto?
Arranz, ha achacado la subida de casos de coronavirus en Mallorca al «aumento de la movilidad» por las compras en días como el 'Black Friday' y el puente de la Constitución. Además, ha advertido de que Mallorca está «en una línea ascendente de casos».
El especialista en Medicina Preventiva y Salud Pública considera que es difícil saber los motivos exactos por los que las Islas han pasado de estar en las mejores posiciones a ocupar. No obstante, considera que «por un lado, se relajaron las medidas individuales pensando que la situación era buena, que solo nos superaba Canarias, que los contagios se centraban en ciertas zonas o en ciertos pueblos. Por otro lado, creo que cuando iban subiendo los contagios no se tomaron las medidas oportunas. La medida más importante que se tomó fue la de toque de queda a las 22:00 horas, insuficiente».
No obstante, March valora que el conjunto de medidas restrictivas aprobadas este pasado lunes «es más amplio y diverso. Seguramente con las medias actuales se bajen las cifras en dos o tres semanas».
En su opinión, lo sucedido en Mallorca «nos demuestra que a este virus no se le puede bajar la guardia». Además, advierte que «es necesario estar pendiente de él para ir tomando la medidas oportunas. Además acabamos de pasar un puente y lo lógico es que ello también influya en la subida desde ahora a dentro de unos días de contagios».