Una encuesta impulsada por la Associació de Mares i Pares (Amipa) del Col·legi Sant Francesc, de Palma, refleja que el 73,4 % de un total de 207 participantes es partidario de establecer una jornada continuada en el centro concertado. Concretamente, a la propuesta de jornada de 09.00 a 14.00 horas en Infantil y Primaria, y de 08.00 a 14.00 horas en la ESO y el Bachillerato, el 73,4 % apuntado responde afirmativamente. El 9,2 % se muestra contrario a la jornada continuada y partidario de la jornada partida que rige actualmente. Finalmente, el 17,4 % es partidario de la jornada continuada o intensiva si se mantiene el estudio asistido por la tarde, lo que no está previsto por el centro por las circunstancias de la pandemia.
Directamente relacionado con lo anterior, la encuesta pregunta si, en caso de de establecerse la jornada continuada, se contrataría el servicio de comedor, resultando que la mayoría, el 57, 5 %, no lo haría. El 42,5 % restante sí recurriría a este servicio.
Este último dato puede ser relevante a la hora de que los centros concertados no contemplen la posibilidad de sustituir su tradicional jornada partida por otra continuada, pues es de suponer que perderían una parte importante de los ingresos generados por el servicio de comedor. De todos modos, también es de suponer que habría familias que, por circunstancias laborales o de otro tipo, dejarían a sus hijos en el comedor aunque éstos asistiesen a una jornada intensiva de clases. Sin embargo, parece que los cálculos de los centros concertados apuntan a una pérdida de ingresos por este motivo que no están dispuestos a asumir si optasen por la jornada continua.
Otra de las ventajas apuntadas para la jornada continua es la reducción de las entradas y salidas de los alumnos. Con un horario intensivo, para cada alumno sólo hay un momento de entrada y otro de salida. Con la jornada partida, hay dos entradas y dos salidas, lo que supone más ocasiones para las aglomeraciones y, por tanto, más posibilidades de contagio. Igualmente, hay progenitores de Sant Francesc que consideran que el espacio de patio del centro, situado en las terrazas superiores del edificio, es demasiado pequeño para el número de alumnos, que ronda el millar, al igual que los espacios que ocupan los estudiantes entre la comida y la reincorporación a clase.
También resulta significativo en la encuesta que el 68,6 % de los participantes afirmen que, con la jornada continuada, renunciarían al servicio de guardia por la tarde (estudio asistido). El 15,9 % sí recurriría a este servicio de 15.00 a 17.00 horas y el 15,5 % lo haría de 15.00 a 16.00. En cualquier caso, como se ha apuntado, este servicio ha sido suprimido. Sí se mantiene en Sant Francesc el servicio de Escola Matinera, que permite a las familias la posibilidad de dejar a sus hijos en el colegio antes del inicio de las clases, sólo para los alumnos de Infantil y Primaria. En el caso de Sant Francesc, el precio de este servicio es de 2 euros por alumno y día.
Reunión con la dirección
La Amipa de Sant Francesc ya ha entregado los resultados de la encuesta a la dirección del colegio y espera mantener próximamente con ella una reunión para tratar la viabilidad de estas propuestas. La Amipa abarca prácticamente todas las familias con hijos en el Col·legi de Sant Francesc. Los centros concertados no tienen ninguna obligación de alterar sus horarios lectivos.
Un debate presente en los concertados
Algunos centros concertados han decidido el horario intensivo o se encuentran en pleno debate sobre el tipo de jornada, pues numerosas familias reclaman la continuada por cuestiones sanitarias y de conciliación.