El precio de la vivienda en las Pitiusas ha subido un 15,5 % desde 2007, cuando alcanzó su máximo de la pasada década, mientras que en Mallorca ha bajado una media del 20 % en ese mismo periodo, según el informe de Vivienda en costa elaborado por Tinsa Research.
Este estudio refleja que la mayor subida del precio de la vivienda se ha producido en Ibiza ciudad, donde ha subido un 19,8 % desde 2007 hasta situarse en el primer trimestre de este año en una media de 3.728 euros por metro cuadrado, un 7,9 % más que en los primeros tres meses de 2019.
Trasladado al conjunto de las Pitiusas, este valor ha aumentado entre el pasado enero y marzo un 3,8 % en comparación al mismo período del año pasado, hasta los 3.938 euros el metro cuadrado.
Según Tinsa, en 2019 predominó en Ibiza la demanda de compradores alemanes, ingleses e italianos, especialmente centrados en el segmento del lujo, con la adquisición de viviendas plurifamiliares con valores entre 8.000 y 10.000 euros el metro cuadrado y superficies en torno a 100 metros cuadrados.
Las viviendas unifamiliares alcanzaron precios de hasta 20.000 euros el metro cuadrado, sobre todo en las zonas más exclusivas de la isla, como Sant Josep y Santa Eularia.
El nivel de excedente de obra nueva de producto vacacional en el municipio de Ibiza en 2019 fue muy bajo y predominó la oferta de segunda mano y de alquiler, año en que aumentó un 5,4 % la compraventa de viviendas, con un total de 487 propiedades, de las cuales 51 eran viviendas nuevas.
Además, en Ibiza se visaron en 2019 hasta 444 viviendas, que supone una subida del 49,5 % respecto al año anterior. Mientras que los visados de viviendas unifamiliares bajaron un 62,9 % respecto a 2018, las propiedades plurifamiliares se incrementaron un 64,5 %, según el estudio.
En cuanto a Mallorca, el coste de la vivienda en siete municipios analizados, tanto de costa como de interior, ha aumentado un 5,8 % respecto al primer trimestre de 2019, con un valor medio de 2.135 euros el metro cuadrado, si bien desde su máximo en 2007 ha descendido un 20 %.
Las mayores bajadas de este coste desde 2007 se han registrado en los municipios de Capdepera (-44,7 %), Santa Margalida (-36,9 %) y Manacor (-33,5 %) mientras que, hasta marzo de 2020, el precio de la vivienda terminada ha subido de media en la isla un 5,8 % respecto al mismo periodo de 2019, con el mayor encarecimiento de su coste en Sóller (14,7 %), Palma (7,6 %) y Manacor (0,3 %).
El relación a las compraventas en Mallorca, destaca la subida del 38,1 % en Capdepera respecto a 2018, con hasta 319 viviendas y un aumento del 491,7 % de la propiedad nueva, mientras que en Santanyí, con un 32,2 % respecto al año anterior, la nueva vivienda ha aumentado un 970 % en comparación a los 10 inmuebles nuevos de 2018.
Además, la mayor subida en el número de obras nuevas visadas el pasado año fue en Son Servera, con un 780 %, seguido de Manacor (477,1 %), municipio en el que se incrementó un 656 % la construcción de viviendas unifamiliares. La tercera mayor subida se encuentra en Capdepera, con un 318,2 % más de obras visadas respecto al año anterior.
Cabe destacar el aumento del 1.064 % en viviendas plurifamiliares visadas en Santanyí respecto a 2018, pasando de 14 a 163 el pasado año, que supone el mayor incremento en este tipo de domicilios.
En Mallorca, el comprador extranjero procedía el año pasado de Alemania y de países del norte de Europa, mientras que el cliente ruso, que hace dos años crecía con fuerza, prácticamente ha desaparecido.
También el pasado año se reactivó la actividad promotora, especialmente en las zonas de Palma y Calvià. Esta iniciativa corresponde sobre todo a grandes promotores tradicionales, según Tinsa.
El mercado residencial en la costa española se caracterizó en 2019 por la estabilidad y una demanda activa, tanto nacional como extranjera, aunque ya se detectaban antes de la pandemia ciertos indicios de agotamiento en las zonas donde la recuperación se inició con anterioridad, ha detallado Tinsa.
A nivel nacional, además de la subida de Ibiza capital, también destaca la Costa del Sol, que mantenía antes de la crisis del coronavirus una tendencia a la alza en cuanto a precios, aunque las compraventas se redujeron respecto a las de 2018.
Según el informe, la vivienda en la costa española experimentó el año pasado una situación saludable, ya que en el 91,7 % de las zonas analizadas, los técnicos describieron que el mercado presentaba indicios de recuperación o una clara recuperación.